HEARTLESS (TODODEKU) (BAKUKIRI)

ATRAPADO

Lentamente su conciencia volvia a la vida ¿dónde estaba? ¿Qué había pasado? Su cuerpo le pesaba al punto de negarse a despertar ¿Por qué? Solo su mente estaba despierta, podia sentir los ruidos a su alrededor y ciertos aromas. A juzgar por ello estaba en un hospital. ¿Qué habia pasado?

Recordaba que fue junto a algunos compañeros de clase a salvar a Kacchan de la liga de los villanos y se toparon...All for One. Luego...luego All Minght lo enfrentó logrando asi vencerlo. Pero..¿por qué sentia esta inmensa angustia? Su cuerpo se negaba a despertar mucho menos a moverse y su mente volvia a embotagarse. All Minght habia extinguido su ultima llamarada de poder y ahora le habia llegado el turno a él para hacerse notar y ser el nuevo heroe que represente al simbolo de la paz. Pero...¿qué sucedió con su persona para encontrarse tan abatido?

De repente las imagenes se fueron agolpando en su mente una a una. Su casa, su madre en la puerta, All for One, una explosión, su casa junto a su madre extinguiendose en un instante. All For One burlandose de su persona y él...en plena desesperación. Destruido por dentro. Dolor, mucho dolor. La certeza de la más absoluta soledad lo desvastó. La angustia volvia a adueñarse de él junto a la más intensa oscuridad. Y después miedo, dolores fisicos indescriptibles que se fundian con los morales. Deseo de desaparecer de este mundo. Su conciencia volvía a nublarse. Lo último que logró oir fue la voz de Todoroki diciendole:

"No estás solo, regresa...Deku".

Nada. Vacio total. Oscuridad intensa y aquella infernal inmovilidad que lo aprisionaba era lo que sentia, hasta que su mente volvió a desvanecerse en la más profunda inconciencia.

Cuando su conciencia volvia a despertar sintió la voz de Todoroki nuevamente y por el timbre de su voz parecia preocupado. Pero el recuerdo de su madre invadió su mente provocandole ese angustioso dolor que le provocó ganas de llorar. Las lágrimas humedecieron su rostro.

Repentinamente sintió el calor de Todoroki que le sujetaba su mano mientras le decia:
- Tienes mucho por hacer, tu madre no hubiese querido que te dejes vencer por la tristeza. No estas solo, nosotros estamos contigo. Despierta Izuku...por favor...despierta

Despertar. Pero ¿qué le esperaba a él en esa realidad? Vacio y soledad. No tenia ningun familiar ¿qué seria de su persona? ¿A dónde iría ahora? Además aquel Don que despertó en él lo desintegró por dentro. Tenia miedo de si mismo.  Despertar. Ojalá pudiera...Todoroki. Empleando toda su voluntad pudo cerrar su mano en la de su amigo, necesitaba transmitirle de alguna forma el mensaje. Podia oirlo, estaba ahi. Solo que...no sabia cómo regresar. Además sentía miedo, mucho miedo de lo que podria pasar tanto por la muerte de su madre como por la aparición de su nuevo Don.

Voces de diversas personas se agolpaban a su alrededor y ya no sentia ni siquiera el tacto de su amigo. Pero las palabras provenientes de la voz de un desconocido lo alertaron repentinamente. Su timbre era duro y aspero.
- Ésta droga lo mantendrá controlado, no podrá aflorar ese Don.
Su respiración comenzaba a agitarse

¿Droga? ¿Qué droga? ¿Qué planeaban hacerle? Sintió que sujetaban su brazo derecho y le arremangaban la manga de la ropa, luego sintió algo fresco rozar su piel. Estaban por inyectarle algo, una droga. No podia hacer nada, que alguien lo ayude. No queria ser drogado por algo que ni idea tenia. Si bien ese Don lo asustaba, queria que lo ayuden enseñandole a usarlo. No durmiendolo asi.

Pero nadie llegó en su ayuda y aquel doctor porque era mas que evidente que se trataba de un doctor, le inyectó esa dolorosa droga que al instante embriagó sus sentidos embotandole la mente. Al cabo de unos momentos sintió como si flotase en las nubes. Las voces le llegaban de lejos, no podia disitinguir de quienes eran ni entendia lo que decian. Sentía la cabeza pesada y hasta le costaba respirar con normalidad. Perdió la conciencia nuevamente.

Cuando volvia su mente a revivir sin dejar de sentir su cabeza pesada era solo para sentir aquel fresco liquido rozar su piel y el pinchazo de la inyección nuevamente. Entonces volvia a caer en las garras de la inconciencia. Estaba atrapado en ese ciclo sin fin, sin poder escapar. Era prisionero de quién sabe quiénes y nadie, absolutamente nadie, iba en su ayuda.

"¡Que alguien me ayude! ¡Por favor! ¡Todoroki! ¡kacchan! ¡Ayudenme! ¡All Minght!".

Al menos deberian dejarlo morir, si pensaban impedirle despertar seria mejor que lo mataran. Pero haberlo encerrado así, en su propio cuerpo era en exceso cruel. Porque esa droga que dormia su Don le estaba impidiendo despertar, mover su cuerpo salir de ese encierro.

"Mamá, llevame contigo. Por favor".

Pero algo en él se impuso a todo ese pesimismo, algo en su propio interior le dió la fuerza necesaria para luchar. All Minght jamás se daría por vencido. Nunca lo haría. Entonces él tampoco. Se obligó a si mismo a despertar.

"Despierta, vamos. Reacciona Izuku"

Haciendo uso de toda su voluntad y fuerza mental se fue abriendo paso entre la densidad de la niebla mental hasta ir despejando su agotada mente y volver a ser conciente de lo que sucedia a su alrededor. Escuchó la voz de Todoroki con claridad junto a la de Kacchan.

La oscuridad amenazaba con devorarlo nuevamente pero ésta vez no se lo permitiría. Empujó con todas sus fuerzas hasta destruirla recién pudo abrir los ojos. La pálida luz de la habitación lo encegueció al principio pero luego pudo ver el lugar con claridad. Todoroki estaba a su lado y Bakugo un poco más allá.

- Shoto - susurró como pudo - Ayúdame...por favor...
- Izuku - dijo éste asombrado
Kacchan lo miró con el asombro dibujado en su rostro también y velozmente se le acercó. Los dos parecían estar viendo a un muerto que regresaba a la vida. Era hasta gracioso aquello. Deku hizo mayores esfuerzos por hablar

- Shoto...Kacchan...ayúdenme...por favor...
- ¿Qué te pasa Deku? - dijo Bakugo
- Hay que llamar al doctor - continuó Todoroki
- No...por favor...Que no me...inyecten más...no dejen...que me...inyecten...esa droga...

En ese momento entraba el doctor que le habia estado inyectando aquello, Izuku lo supo al oir su voz y con desespersción sujetó la mano de Shoto.
- Excelente, despertaste Izuku - le dijo el doctor - Es hora de tu medicina
- ¡Ayúdenme...chicos!