5

505 63 2
                                    

No lo podía creer documento digital que había llegado a su correo esa mañana.

"Estimado señor Couffaine:

Le escribimos por parte de toda la administración de Senzoku Gakuen College of Music para enviarle un cordial saludo a usted y a sus seres queridos. El motivo de la presente es para informarle que hemos considerado su caso como especial. Es bien sabido que es reconocido por su trabajo otorgado en favor de París, Francia; empero, queda asegurado que como institución destinada a la expresión artística musical, nuestro interés en usted es gracias a su gran afición y disciplina demostradas dentro de esta área, siendo partícipe de la banda "Kitty Section", de la cual, no dudamos su alta calidad y esfuerzo.

Por otro lado, hemos considerado que la mejor opción para nuestros estudiantes, es adaptarse a las nuevas circunstancias antes de ingresar al 100% con nuestro plan de estudios.

De esta forma, Senzoku Gakuen College of Music le da la bienvenida a partir de esta semana a nuestras instalaciones. Cualquier gasto requerido será con mucho gusto reembolsado.

Le esperamos dentro de dos días con gran ánimo y entusiasmo que tanto se le caracteriza.

Atentamente:

Dir., de Senzoku Gakuen College of Music."

Dos días. Debía irse en dos días.

Por una parte, no podía esperar.

Pero por otra, era tiempo de darle la noticia tanto a su madre como a Juleka.

Oh cielos...

Llamó por sexta vez, pero el teléfono de Luka la volvió a  redirigir a su contestador automático:

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Llamó por sexta vez, pero el teléfono de Luka la volvió a  redirigir a su contestador automático:

"Hola, soy Luka. Si no contesto problamente es porque estoy muy ocupado. Mil disculpas, espero no meterte en problemas. Deja tu mensaje que yo te contestaré. Lo prometo."

—Hola, Luka. Soy yo de nuevo, Marinette. Eh, ¿seguro que anda todo bien en casa? Puedes contar conmigo si necesitas ayuda. Como sea, llámame en cuanto escuches esto, me urge hablar contigo —dejó una pequeña pausa—. Es muy importante. Te...

Sonó el bip, y la llamada se cortó.

—¿Por qué no responde, Tikki? —se quejó, sentada en su cama mirando y viendo sus más de veinte mensajes en el buzón de su amigo, los cuales seguían sin llegarle.

—Tal vez sí esté muy ocupado. Estoy segura que en cuanto pueda te llamará.

—Lo sé, pero —bufó—. Justo hoy que tengo el valor de decirle lo que siento no contesta, ¡¿por qué esto me pasa a mí?!

—No es el fin del mundo, Marinette. Luka no tardará en llamarte, estoy segura.

Suspiró.

—Eso espero —se encogió, tomando sus rodillas contra su pecho y enterrando su cabeza entre sus brazos—. Ojalá se lo hubiera dicho esa noche en el río, era el momento perfecto para una confesión.

Luka, tengo algo que decirteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora