Al Día Siguiente

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Me desperté y me levanté en seguida de lo cual me arrepentí ya que me di un fuerte golpe en la cabeza porque al parecer me había quedado dormido debajo de una mesa.

Escuché una risa, mire rápidamente a mi alrededor para saber de dónde provenía aquella risa y supe que me encontraba aun en la casa de Jungkook ya vacía por la fiesta de ayer y había un desastre por todos lados.

No había mucha diferencia entre la casa sucia de Jungkook y con el cuarto de Taehyung pues la mayoría del tiempo estaba desordenado aunque yo lo solía regañar ya que me causa ansiedad estar en un lugar así por varias horas.

Salí debajo de la mesa para irme inmediatamente, pensado en el porqué mis amigos me dejaron aquí solo. Me dolía demasiado la cabeza.

A decir verdad no recordaba algunas cosas, solo haber bailado y bebido algunas pocas cervezas. «fue divertido» pensé, estaba orgulloso de mi y después solté una carcajada al recordarme bailado frente a todos.

Volví a escuchar aquella risa y me sobresalté.

—Toma esto —volteé hacia el dueño de aquella voz. Sentía que ya lo había visto.

—¿Tú quién eres? —cuestione confuso.

—Ah, debiste estar tan ebrio que no recuerdas nada —declaró con suficiencia.

—¿Eh?¿De qué estás hablando? —seguí confundido, ¿Qué estupideces pude haber hecho?.

—Bébelo, es café eso te hará sentir mejor.

—Gracias... —dije dubitativo.

En ese momento recordé de donde lo había visto, lo invite a bailar ayer y él me rechazó, sentí apenado.

—Yoongi —le llamé entrecerrando los ojos—. ¿Tú que haces aun aquí?, te arrepentiste de rechazar mi perreo verdad, por eso te quedaste aquí —dije satisfecho mientras lo recriminaba con un dedo.

Yoongi rió, no era para nada la reacción que esperaba, me sentí ofendido de nuevo.

—¿entonces por qué sigues aquí? —pregunté rodando los ojos.

—yo vivo aquí.

A Jimin le gusta la gasolina Donde viven las historias. Descúbrelo ahora