SYMBIOSIS [ABANDONADA]

VII: Extranjero

- capturen a este hombre- esas habían sido las palabras de su superior.

Naruto estaba caminando en círculos por su habitación, incapaz de dormir aquella noche.

Sabía quién era, sabía dónde podía encontrarlo, ese tipo había secuestrado a personas inocentes para quien sabe qué fin, incluso podrían estar muertas.

¿Entonces por qué?

¿Por qué no lo delató en ese mismo instante?

¿Por qué estaba tan preocupado por su captura?

La mayoría de los científicos presentes esperaban que Naruto saliera gritando de la sala como el loco que era, después de todo, este era el hallazgo de su vida, era la prueba inequívoca de que siempre había tenido razón.

Sin embargo salió igual de pálido que sus colegas, solo que en lugar de estar asustado por la existencia confirmada de vida fuera de la tierra, estaba asustado porque ahora el resto de humanos lo sabía.

Si bien no eran más de diez personas quienes sabían, no estaba tan seguro de cuanto tiempo iba a permanecer aquel secreto encerrado; por supuesto, él no abriría la boca pero con la cantidad de infiltrados y la propia paranoia de sus compañeros dudaba que aquello pudiera mantenerse más de 10 años.

Su reloj sonó anunciando las cinco de la mañana, luego de su reunión el equipo se había movilizado rápidamente en un rastreo total del área, al no poder usar helicópteros ni drones debían hacerlo a la antigua, a pie y con sondas especiales.

Para desgracia de Naruto, el primer sondeo sería en exactamente las zonas montañosas que delimitaban la ciudad, peligrosamente cerca de donde estaba la nave de Sasuke, lógicamente también el área donde el helicóptero se estrelló.

Había intentado todo el día abrir un canal de conexión con Sasuke para advertirle pero no parecía funcionar en lo absoluto, no se sentía esa unión que los ataba a ambos como cuando Sasuke lo hizo por lo que asumió que sólo él podía abrir esa brecha de comunicación y Naruto simplemente responder, eso no significó que no estuviera alerta ante el más mínimo indicio de noticias.

Una camioneta blanca se estacionó frente a su casa y él bajó, siendo recibido por Shikamaru, jefe de la división y por Konohamaru quien se había recuperado lo suficiente para el operativo.

- Bien, nos corresponde el área norte, aunque yo descartaría la zona entera no está de más hacer un chequeo rápido, por un lado sería lógico asumir que nuestro objetivo se mantenga alejado de las posiciones donde fue comprometido, pero por supuesto, estamos hablando desde el razonamiento humano, no tenemos idea alguna de como este ente razona, si es que tan siquiera lo hace, bien podrían ser sus instintos, la verdad es que ni siquiera estoy seguro de lograr algo- suspiró con cansancio el Nara, era un estratega increíblemente inteligente pero solo para los humanos, nunca había lidiado con fuerzas alienígenas antes, incluso ahora con toda la evidencia presente le costaba creer que seres de otros planetas existieran realmente.

- podemos asumir que son inteligentes, las probabilidades de coincidencia en apariencia con los humanos son prácticamente nulas al menos en lo que se conoce de Andrómeda y la vía láctea, esto quiere decir que de alguna manera adaptó su anatomía o al menos su apariencia para hacerse pasar por un humano, si no es tecnología bien podría ser una propia cualidad de su especie- Naruto se dió cuenta de lo que estaba haciendo hasta que sus palabras lo traicionaron, sabía que ser un bastardo nerd ufólogo le iba a traer consecuencias graves algún día, sólo que estaba vez no sería él el afectado.

Por otro lado intentaba quitarse el remordimiento por ser un boca floja al pensar que debía mantener las apariencias y fingir colaborar con sus compañeros.

- odio decirlo pero eres el experto en este campo, amigo- se burló Konohamaru, los tres se rieron levemente logrando aliviar la tensión que este asunto les provocaba.

Sólo para ser interrumpidos por la radio de la región Oeste.

- lo... encontramos- exclamó una voz entrecortada por la estática, inmediatamente la llamada fue cortada y el canal bloqueado.

Naruto se paralizó.

¿Cómo lo habían encontrado tan rápido?

¿No se supone que el idiota era un ser superior de otro planeta?

¡Sasuke idiota!

...

Sasuke estornudó, tal vez el clima de este lugar le estaba afectando, su planeta solía ser mucho más cálido que esto.

Según su rastreador, la estúpida llave de triple aspa había caído cerca de aquí; por alguna razón se había sentido adolorido la mayor parte del día, como si algo estuviera intentando hacerle un hoyo a su cabeza, se sintió cansado y desorientado durante varias horas hasta que por momentos desapareció, se preguntaba si este planeta era peligroso para él ya que había estado teniendo reacciones extrañas en su cuerpo desde su aterrizaje forzado.

En ese momento el sol aún no salía por lo que confiaba en que era seguro buscar sus piezas faltantes, su nave casi estaba reparada, sólo algunas cosas más y podría irse directo a su planeta junto a su hermano, el pobre debía estarse volviendo loco por su ausencia.

No tenía idea de cuánto tiempo equivalía su hora a la de su planeta, pudo ser segundos de diferencia así como siglos, era mejor no arriesgarse.

Hablando de cosas faltantes...

Había estado experimentando con humanos en busca de diferentes datos sobre ellos, todo estrictamente rutinario, se vio sorprendido cuando ninguno despertó ese extraño sentimiento corporal.

Al parecer solo ese "Uzumaki Naruto" había provocado dicha reacción.

¿Tal vez él era especial en su especie?

Sasuke pensó en que sería recomendable llevarlo consigo, después de todo aún tenía tanques vacíos, intentó contactarlo a través de su canal para encontrar su ubicación.

Nunca esperó el grito que resonó en su coraza craneal.

- ¡Vete!- se movió justo antes de que un rayo le atravesara las costillas, volteó frenéticamente a todos lados, hombres en vestimentas negras y verdes se acercaron a él con sus armas en mano.

- Si eres capaz de entendernos, será mejor que te tires al suelo, ¡Abajo!- uno de los hombres hizo el movimiento ordenado en caso de incomprensión.

A la distancia vio una camioneta ser estacionada y tres individuos descendieron de ella, al parecer la suerte estaba de su lado, su conejillo predilecto había abordado la escena.

Para el horror del resto de humanos se deshizo en un charco negro y espeso de masa brumosa y asquerosa yendo en dirección al rubio, el suelo se lo tragó y ambos desaparecieron ante la atónita mirada de los científicos y soldados.

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Sí, cansada como la mierda, intento de tomarme pastillas pero al final desistí, 12 horas sin dormir, no pensar coherente, errores ortográficos, dios en qué estaba pensando al escribir a las 3 de la mañana.

Merlin.