- Aquí me siento yo- Seydi me miró y negó con la cabeza.
Acababa de llegar a clase y en mi sitio estaba sentada doña "me tocas y me sonrojo". Todas mis cosas estaban fuera del pupitre y estaba metiendo la suyas.
-Entiendo que estes desubicada por que acabas de llegar aquí y todo tiene que parecerte muy confuso pero aquí me siento yo, tú te sientas ahí- señalé el pupitre dónde se había sentado ayer.
Ella negó con la cabeza- Escuchame a lo mejor no me has entendido bien con lo de que eres francesa: Tú te sientas ahí- volví a señalar el otro pupitre- yo me siento aquí.
-Te he entendido a la primera, pero cuando he venido Emilio- se volvió a sonrojar al decir su nombre- me ha dicho que mi nuevo sitio es este.
La cólera comenzó a apropiarse de mi cuerpo y dudé entre a cual de los dos matar primero.
- Me da igual lo que te haya dicho Emilio si se quiere poner contigo que mueva su culo y se vaya a otro sitio pero este pupitre es mío.
-Parece que sigues sin compartir con los nuevos ¿las buenas costumbres no cambian señorito Bondoni?- la rotermeyer estaba detrás de mí con los brazos cruzados.
-Roter...digo señorita Read este es mi sitio y...
-Lo sé pero el señor Marcos me preguntó ayer y yo le di permiso, usted se sentará con la señorita Marin. ¿Le parece bien?
Bufé-si señorita Read
Me senté al lado de Pau la cuál me miraba con su cara de "te lo dije"
-Escuchame cuanto más lo pienses es peor te lo digo por experiencia, dolerá un tiempo pero volverás a recomponerte eso sí no le dejes ver que te ha afectado.
La sensación que tenía era rara, cómo si lo que estaba pasando fuera irreal algo que a mí no me podía suceder.
Supongo que es algo que les pasa a muchos adolescentes, ser usados y hacerse falsas esperanzas para luego solo tener humo. Pero realmente nunca pensé que me pasaría.
Toda la clase no pude evitar mirarles figamente. Estuvieron haciendo manitas cada segundo, de vez en cuando Emilio me miraba de reojo y sonreía cómo si se le alegrara de mis celos. En esos momentos yo no trataba de ocultarlo así que seguía manteniendo la mirada de "si te descuidas acabas a trozos en una bolsa de basura".
-Joaco tienes que dejar de mirarles- la voz de Pau me sacó de mis pensamientos.
-La odio, ojalá la induzca un ovni, le saque su pequeño cerebro y la diseque.
-Joaco sabes perfectamente que ella no tiene culpa de nada es Emilio el que juega con tus sentimientos no Seydi. Además estoy convencida de que si la conocieras te caería bien y...
-¡No! Es sencillamente insoportable "Ay Emilio, me ha pasado un boli espera que sonrojo" " Ay Emilio que guapo eres" "Ay Emilio necesito un macho italiano cómo tú para que salve a una delicada francesa como yo". - dije imitandola y Pau contuvo la carcajada. Lo que más me molestaba era que sabía perfectamente que la culpa de esto no la tenía ella y Pau tenía razón pero de ninguna manera voy a hacerme su amigo y me explique lo que contienen las notas de Emilio.
-Pues aunque no lo creas a veces parecías ella.
-¡Paula Marin ese es un insulto imperdonable! Yo jamás he sido tan ñoño.
-Ya ya...en el fondo pensé que de verdad el estaba loco por ti y que te dijeron lo contrario eran celos por que tu hubieras conseguido lo que yo perdí.
-Pau, Aiden está por ti se ve a kilometros y tú también estás por él.
Enrojecio y negó con la cabeza- No por supuesto que no, yo lo odio y a él le gustan todas las personas de esta maldita clase así que no hay más que hablar.
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Ese Virgen es Mío [Emiliaco] ✔
FanfictionHace unos años los chicos descubrieron, en una maravillosa clase de biología, que cuando metían cierta parte de su cuerpo en el nuestro les daba gustito. Desde entonces quieren meter su cómo llamarlo...¿churro? en nuestro real agujero en concreto ti...