capítulo 2

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Desperté al pie de un árbol, al ver sus ramas pude divisar el fruto que Turles siempre comía. Me senté de golpe, abrazando mis piernas con temor. El corazón retumbaba con fuerza en mi pecho, resonaba en mis oídos y temí que este se fuera a salir de mi cuerpo.

-No temas- frente a mí se encontraba A17- nadie te hará daño

- ¿Por qué? - me animé a preguntar.

-No lo sé, eres de interés para Turles- le restó importancia.

A17 me dio una botella con agua y se alejó, no me moví a pesar de estar sola. Si no había nadie custodiándome era porque en definitiva ahí no había posibilidad de huir. 

-Son Pan, nieta de Kakarotto – dijo Turles. Desde mi posición se veía imponente, poderoso y no era para menos, su ki era tan poderoso como el de Trunks y Goten. Quizás hasta como el de papá -¿Sabes por qué estás aquí?

-Porque tú me trajiste ¿o ya se te olvido?

Me mordí el labio sin que lo notara ¿Por qué había respondido de esa manera? Turles soltó una risotada y se acercó a mi rostro, muy cerca de mi rostro.

-Pequeña fiera- ronroneo deslizando su mano por mi cabello- eres una de las pocas con sangre saiyayin

Espero no lo diga enserio.

-Hay dos en un universo solo que no recuerdo de cual son, sin embargo, son unas vulgares sin gracia, fracasada que no tienen la pasión por ser autosuficientes. Dependen de la otra. Pero, tú, mi pequeña fiera eres perfecta… para mi 

Sentí una arcada subir. No podía ser verdad lo que imaginaba.

-Solo debo esperar unos cuantos años para hacerte mía y tener vástagos poderosos para que nuestra raza surja de nuevo

Lo peor que podía pensar, se confirmó.

A17 se hallaba un poco alejado, pero escuchaba todo y su sonrisa reflejaba burla hacia a mí.

Quería llorar.

¿Era esto lo que me deparaba? Ojalá vengan pronto por mí.

 .-.

Después de que la brecha se cerrara el efecto de congelamiento se desvaneció. Los saiyan intentaron en vano alcanzar la última partícula verdosa. Gohan gritó enfurecido descontrolando su ki, haciendo que el pequeño lugar temblara y comenzara a caerse en pedazos. Sus ojos quedaron en blanco, su ki salía como rayos sin dirección alguna, su cuerpo comenzaba a incrementar en musculatura, era en definitiva que cuando Gohan se enojaba, no había nadie capaz de igualar su poder.

-¡Detente!- espetó Vegeta dándole un puñetazo en el estómago, pero no parecía tener efecto. La ira de Gohan era incontrolable.

Goten y Goku se acercaron y lo tomaron de los hombros, hablándole, intentando hacerlo entrar en razón.

-Cálmate- le dijo Goku- la vamos a traer de vuelta, pero cálmate, hijo

-Si hermano, detente o sino harás que este lugar desaparezca

Trunks miraba fijamente el punto en el cual había desaparecido Pan, la frustración de no poder cumplir la promesa a su maestro le incrustaba una espina en el pecho. Pero a diferencia de Gohan no perdió el control, sino que en su mente los posibles planes que esos malditos tenían con Pan ya se iban formando.

- ¿Ya descubriste porqué se la llevaron? - le preguntó Vegeta. Gohan ya se encontraba un poco calmado - solo se me ocurren dos cosas

- ¿Cuáles, papá?

-Una trampa o una aliada

- ¿Aliada?

-Seguramente quieren convertirla en algo que puedan usar contra nosotros

Para Vegeta aquello era absurdo puesto que Pan no tenía un gran poder, pero al ver como ellos tenían un ki que los igualaba o incluso lograba superarlos en momentos, la idea de que algo puedan hacer con ella para enfrentarlos, no le era tan descabellada. Había otra, pero no la creía posible, no era posible que quisieran a Pan para eso.

-No es posible- murmuro para sí mismo.

-Lamento mucho mi exabrupto - se disculpó Gohan, con el ki aun elevado - pero, comprenderán por lo que estoy pasando

Todos asintieron compresivos, incluso Vegeta.

Chronoa quien había permanecido dentro de la habitación todo el tiempo y, enterándose de todo por Goten comenzó a buscar el ki de Pan por todo el universo, lo ubico cerca de varios ki”s malignos y de una energía mayor pero que no era de un ser.

-Ya se en donde esta

Inmediatamente todos partieron en su búsqueda.

.-.

De un momento a otro A17, Turles y el tipo llamado Fu voltearon a ver a una dirección, fruncieron el ceño.

-Ya vienen

-Espero esto valga la pena, Turles, no estoy para perder mi tiempo – me miro con desagrado- no quiero problemas

Turles no le hizo caso y de nuevo me tomo en brazos. Desaparecimos otra vez.

Cerré lo ojos al sentir una fría ventisca golpearme el rostro, me aferré al pecho de Turles debido al frio que hacía, él me apretó más, protegiéndome.

-Eleva tu ki

Le hice caso y él también aumento su ki cubriendo nuestros cuerpos. Ya no hacia mucho frio y note como nuestros kis estaban notablemente divididos, no como cuando unía el ki con mi papá, mi tío o mi abuelito se lograban compenetrar un poco creando una calidez familiar. Turles a pesar de ser un familiar lejano no era compatible conmigo.

Al parecer lo notó porque bufo molesto.

.-.

Llegamos a un bosque, los arboles eran tan altos y espesos que apenas nos permitían ver el camino y eso que el sol, o mas bien sus tres soles estaban en lo más alto. Caminamos en silencio, para evitar hacer contacto con el me puse a observar el entorno, había arbustos con frutos extraños, hojas de colores grises y amarillos, animales sumamente raros de los cuales no les encontré ninguna relación con los de la tierra ni otros que ya extintos.

Llegamos a una casa hecha de piedras, Turles toco con suavidad y espero con paciencia- me sorprendió su cambio de troglodita a civilizado- pronto salió una anciana con el atuendo característico de una bruja sin embargo no era la típica jorobada, mas bien era lo contrario, era una señora alta, erguida y con una elegancia que dejaría boquiabierta a Bura y a Marron. Era una dama en palabras mayúsculas.

-Señora, ella es de quien le hable

La señora me miro y sonrío.

-Sus ancestros y familiares poseen poderes inimaginables- comento- con entrenamiento adecuado podrás ser muy fuerte niña. Dejala conmigo

Turles me dejo sola.  

 

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