La (in)útil guía para la creación de personajes(Y Otras Divagaciones Literarias)

Humanos

Aunque el argumento de nuestra historia no sea el mejor, si nuestros personajes están bien construidos lograremos que el lector se enganche rápidamente.
Para hacer eso, tenemos que tener en cuenta que nuestros personajes son humanos (aunque sean de otra raza).
¿Qué significa esto? Pues, en pocas palabras, que no son perfectos
Puede que te de pena tener que ponerle defectos, pero es algo necesario si se quiere crear a alguien memorable. Así, el lector se sentirá identificado y se interesará aún más (además de que le da al personaje profundidad). Por otro lado, el darle fallos ayudará en el desarrollo del personaje a través de la historia. Por ejemplo, puede que al principio nuestro protagonista fuese demasiado crédulo, pero tras darse cuenta de que le gente lo usaba, se convirtiese en alguien más cauteloso.
Tenemos que lograr personajes que no sean blancos ni negros, más bien  grises. Personajes que podemos encontrarnos fácilmente por la calle e incluso invitarlos a tomar un café mientras hablamos con ellos (lo del café es un truco que escuche hace tiempo pero a mí no me funciona. Antes de decir las primeras palabras se me fríe el cerebro, pero vosotros podéis intentarlo).
Independientemente del argumento, guión o tema del libro con personajes así vamos a seguir leyéndolo porque vamos a querer verlos enfrentarse a problemas, resolver estos mismos, relacionarse, hablar, y en general crecer como personas. Tampoco hay que tener miedo de ponerle piedras en el camino, un personaje que tiene las cosas fáciles no es interesante.
Incluso los villanos, por muy "malos" que sean, siempre tienen algo bueno.
Con esto intentamos conseguir alguien lo más realista posible.

En resumen; nadie es perfecto. Tus personajes, tampoco.