¿Un capricornio y una tauro?

¿Comienzo de una historia sin final?

Uno nunca sabe las vueltas que puede dar la vida, hasta que las da.

¿Conocéis estos amores platónicos que siempre nos imaginamos o simplemente son el prototipo "perfecto" para una mujer? Bueno, pues yo nunca pensé que esos chicos existían más que en fotos o en series/películas. Y ni si quiera eso.

Me presento: me llamo Alejandra, tengo 16 años y nunca pensé que llegaría a depender de una persona. ¿Que por qué digo esto? Muy simple.. Soy la típica chica que no depende de nadie para nada, que sabe cuidarse sola, pero llegó él y lo cambió.

Era una tarde como otra cualquiera de verano, estaba en mi casa y no me separaba de mi teléfono móvil ya que un chico de twitter había hecho un grupo de Whatsapp en el que yo estaba dentro y no dejaba de recibir mensajes de ese grupo, así que no me quedaba de otra que leer los mensajes. Esa misma tarde, unas chicas que había conocido en el grupo hicieron otro y la verdad, me cayeron muy bien, pero con la que tenía más contacto era con una chica de un pueblo de Castilla la Mancha, se llamaba Alba.

Esa misma noche salí con mis amigas y en eso mi teléfono móvil empezó a vibrar como loco, cuando vi que era el Twitter entré para leer los tweets y en eso veo que el culpable de que mi móvil vibrara como loco estaba hablando con otra persona, especifico, le subía el ego al otro chico. Bueno, ya que le decía tantos halagos entré en la cuenta de este chico "_amourcaché". Sólo por el nombre de su cuenta le seguí, y seguidamente vi su foto de perfil... Me quedé mirando fijamente sus ojos verdes, tenía una mirada que parecía que podía entrar en tu alma sólo con mirarte -si así era en una foto, no quería imaginarme como sería si le tuviera delante- pensé. Apagué mi teléfono y seguí con mis amigas.

Al día siguiente, vi que "_amourcaché" me seguía tanto en Twitter como en Instagram, sinceramente, la notificación de Twitter me daba igual, fui directa a su Instagram aceptando su solicitud de seguimiento. ¿Os soy sincera? Morí de un infarto cuando vi sus fotos. Era demasiado perfecto, cutis perfecto, ojos verdes y medianamente grandes, boca perfecta, nariz perfecta, ¡incluso su pelo estaba perfectamente posicionado a un lado de su cabeza a modo de fleco! Sonreí como una tonta y empecé a imaginarme cómo sería ser su amiga y tenerle a mi lado y poder escuchar su voz y sentir su mirada penetrante en mi. Y desperté de mis pensamientos cuando vi una foto en la que él sonreía -Por el amor de Dios, este chico es pura perfección. Seguramente es modelo- volví a pensar. Leía sus comentarios y en mi cabeza batallaba sobre si comentarle o no sus fotos, obviamente si le comentaba pensaría que era otra mojabragas que se paseaba por su Instagram y que quería tirárselo y ya, era mejor no comentar, pero vi en una foto demasiados comentarios de chicas en un intento de no parecer querer comérselo y comenté. Mi lado irónico y humorístico me sirvió de mucho, ya que gracias a ese comentario en su foto, él y yo comenzamos a hablar por Twitter.