El hombre delgado que no flaqueara jamás

GRACIAS POR TODO.

GRACIAS POR TODO

gracias por cambiar mi cielo de color,
pensé que siempre tendría que estar invadido
por el negro que refleja la soledad,
pero tu como si fueses un rayo,
desplazaste la oscuridad,
quien impedía que la compañía,
arribara en mi puerto,
y con tu sonido destruiste el silencio
que ensordecía mis oídos
y no les permitía oír un te quiero.

Gracias por enseñarme, la forma con la cual,
salir del bosque en el que mi razón
se veía presa y victima de la desesperación,
te vi. correr, y por mas que quería no seguirte,
mis pasos se aferraron a tu sombra,
tomaste otro rumbo según tu un camino mas corto
insinuándome que esa era la única salida,
te creí, corrí como nunca,
utilicé los recursos necesarios,
para no perderte de vista,
y sabes?- lo logre.

Pero solo falto un detalle de tu parte,
nunca preguntaste que si yo podía volar,
no me dijiste que había un gran abismo
que separaba nuestras vidas,
y aunque yo trate con todas mis fuerzas
de atravesar ese vació,
lo siento, pero caí,
no se porque aunque te pedí que me ayudaras,
no quisiste tender tus manos.

ahora jugando al fuerte,
trato de escalar el muro,
que construyo la vida con cada uno de mis fracasos,
esperando poder perderme de nuevo,
pero el peso de las lágrimas,
que aun mis ojos, por dolor han guardado,
ahogan mis deseos de luchar
y como al principio termino cayendo;
entonces empiezo a subir aquel serró
de ilusiones creado por tu nombre,
pero el esfuerzo que realiza mi alma
por llegar a la sima, se vea anclado
por la fuerza de gravedad,
que ejercen las dudas y las mentiras
con las que esta historia empezó,
haciendo que el impulso que guarda mi corazón
se vea helado y evaporado por la realidad,
que trae la idea de tener que seguir sin ti.