Familia; Wosacru

01

Valentin

Un llanto me despertó, no puede ser de nadie más aparte de mí chiquita.

Medio cansado me levanté para que no se despierte Agus, estuvo todo el día dibujando. Fui a su cuna que estaba junto a nuestra cama, trate de calmarla pero no funcionó, es bastante tranquila así que debe tener hambre, por eso llora tanto. La envolví en su mantita y fuimos a la cocina para preparar su mamadera.

Mientas calentaba el agua, la hamacaba para calmarla un ratito. Pronto dejo de llorar entonces la dejé en el huevito que se encontraba sobre la mesa y así tener más manos libres para hacer todo más rápido.

Una vez tuve lista su mamadera con dibujitos de animalitos, que le regalaron los papás se Agus, la agarré de nuevo y me senté en el sillón para estar más cómodo.

La mire con ternura y amor, es mí princesa, mi nena. Quien imaginaría verme a mí, con una hijita hermosa como Franchesca.

Imaginar todo este sueño hermoso nació por un capricho de tu papá, pensé mientas la miraba. Nunca me especialice en negarle algo a Agustín, simplemente se me hace imposible, no puedo.

- Amor, quiero que hablemos de algo- Recordé las palabras que utilizó aquella tarde que estábamos los dos abrazados como solemos hacer desde que nos conocemos.

En su momento me asusté, creí que me quería dejar o que me había sido infiel, cosa que no tenía sentido porque tenemos una pajera abierta y siempre lo charlamos con muchísima confianza.

- No me asustes, Agustín- Pedí mirándolo. Él se sentó en la cama y después hablo.

- Yo se que sos gay y por ahí lo que te quiero pedir te puede molestar- Empezó a explicar haciendo que me preocupe más todavía, ¿Que tenía que ver qué yo sea gay con lo que me queria pedir?.

- Decime amor, me estás preocupando-  Hablé sentándome frente a él.

- Quiero hacer un trío-. Y ahí entendí por dónde iba la cosa. Tríos habíamos hecho muchas veces antes, pero siempre con pibes y él quería algo diferente.

- Con una piba- Agregué y bajo la mirada. - Amor, mírame- Pedí.

- ¿Te molesta?- Pregunto despacito.

- Para nada Agus, ya lo hemos hecho antes, no tendría porque-. Dije apretando sus cachatitos, haciendo que sonría. La sonrisa más perfecta que vi en mí vida.

- Te amo, Valentín- Con una sonrisa se acercó a besarme.

- No te escuché, ¿Me lo podes repetir?- Me miro mal pero igual me lo dijo de nuevo.

- Te amo Valentín, sos hermoso, te amo con mí corazón entero- Dijo y me senté sobre el. Cómo amo estar de esa forma con Agus. Solo caricias, palabra lindas que realmente sentimos y nuestro amor.

Después que estuviera todo charlado había que resolver una sola cosa; con quién lo hacemos.

Nunca nos presionamos para hacerlo, solo dejamos que fluya todo. Un día en una juntada se lo contamos a una amiga de nosotros que compartimos hace mucho tiempo. Ella y valentina, su pareja tienen una relación abierta y muy liberal. 

Ella nos dijo que también había estado planteandose eso, ya llevaba muchos años de relación con su pareja y también tenía ganas de hacer algo asi. Nosotros le preguntamos si le gustaría y nos respondio que si, que ella no tenia drama, que había confianza y moria todo ahi pero antes tenia que hablarlo con Valentina. 

Unos dias despues nos hablo preguntando si seguía la propuesta en pie, a lo que nosotros dijimos que si. Organizamos nuestros horarios y una semana después llevamos a cabo nuestro trío.

La pasamos re bien. Fue algo diferente para lxs tres.

Unas semanas más tardes nos pidió si nos podíamos juntar a hablar, advirtió que era importante.

Nos juntamos una tarde que teníamos libre y al principio la situación fue tensa e incómoda.

- Me pone nerviosa esto- Hablo Martina una vez estuvimos los tres sentados en la mesa con el mate listo y unas galletitas para acompañar.

- Tomate tu tiempo- Aconsejo Agus - Podés decirnos lo que sea- Completo con una sonrisa cálida.

- Estoy embarazada- Soltó nerviosas tras un silencio molesto.

Mi novio y yo no sabíamos cómo reaccionar, ¿Que teníamos que hacer?.

- Ustedes saben que yo estoy con Valen y hace años que no estaba con algún pibe- Recordó rompiendo el silencio. - Usamos forros pero...- Dejó la frase en el aire y yo la complete.

- Los métodos anticonceptivos no son cien porciento seguros-.

- Puede fallar- Agrego Agustín con algo de humor.

- ¿Que querés hacer?- Pregunté mirándola a ella.

- Es tu cuerpo y lo que vos decidas va a estar bien- Hablo mi novio tomando su mano. - Nosotros vamos a respetar cualquier decisión que tomes y te vamos a apoyar en todo-. Termino y asentí con la cabeza para que sepa que compartía las palabras de mi novio.

- No quiero ser mamá- Dijo jugando con sus dedos, claramente nerviosa. - Osea en el sentido que no quiero hacerme cargo de una persona- Explicó.

- Eso significa que.. que coso..- Hablé nervioso y Agus me miro con una sonrisa.

- Ustedes si quieren..- Dijo Martí. Ahora está de moda dejar las frases colgadas.

Agustín me miro emocionado, con un brillo más intenso de lo normal en sus ojos y si había alguna duda con esa mirada que me transmitía Miles de cosas, las mando al carajo.

Lo miré y sonreí. El asintió y miro a nuestra amiga que tenía los ojos cristalizados. No haciendo faltas más palabras pero por la dudas Agus de aseguró.

- ¿Encerio?- Le preguntó. - ¿Vamos a ser papás?.

- Sí ustedes quieren si, pero no sé sientan presionados-. Pidió ella.

Y ya no hay dudas, voy a ser papá y que mejor persona que Agus para vivir esta aventura.

Mi novio se acercó a mí para darme un beso corto mientas por sus mejillas escurrían lágrimas. Cuando nos separamos nos paramos para abrazarnos los tres.

- ¿Cómo se lo tomó Valen?- Pregunté una vez volvimos a sentarnos.

- Al principio la impacto un poco pero lo entendió y apoyo mi decisión-. Informó.

Todo fue hermoso después de esa tarde. La emoción de ser papás, comprar Miles de cosas para nuestrx hijitx, prepararnos mentalmente para lo que se la venia y contarles a nuestras familias, eso fue lo que más miedo nos dió.

La semana antes a que mi hija naciera nos comían los nervios, casi no podíamos dormir, estábamos desconcentrados en nuestros trabajos, éramos un desastre hasta la madrugada que apareció un doctor por el largo pasillo del hospital y nos informo que todo estaba bien y podíamos entrar a verla.

A las tres y algo de la mañana, porque la piba tuvo que esperar hasta las tres de la madrugada para nacer, supe que era la felicidad realmente.

Entramos a la habitación donde estaba Martí y Valentina, nos saludamos y hablamos un poquito, Martí estaba agotada después de tanto trabajo. Me imagino que dar a luz a una persona debe ser cansador.

Agus fue el primero en tenerla en sus brazos, yo no me animaba, que iba a pasar si se me caía o se lastimaba por los nervios que tenía.

Cuando tuve el valor la agarre y unas lágrimas escaparon de mis ojos. Era muy emocionante tener en mis brazo a la personita que espere tantos meses.

- La concha de tu vieja, Franchesca- Putee cuando escuché su llanto, estaba distraído y me asusto.

Al instante que le hable un poquito se calló por suerte, llegaba a despertar a Agus y me cagaba a piñas.

- Vamos a dormir, hija- Dije bajito y fuimos a la habitación. La acomode al lado de Agus, la tape bien y después me acosté yo.

holA.