Tan Sólo Un Favor [𝙙𝙞𝙘𝙠𝙠𝙤𝙧𝙮] [𝙧𝙤𝙗𝙨𝙩𝙖𝙧]

Capítulo 8: "Siempre tengo razón, Grayson. Recuérdalo"

Cuando Dick despertó, lo primero que pudo percibir fue una luz cegadora. La fría incandescencia le nubló la vista por unos segundos, hasta que sus pupilas se acostumbraron lentamente a la iluminación del ambiente. A su alrededor, había paredes blancas y muebles de una tonalidad parecida a crema. Cuando intentó reincorporarse, rechinó levemente la cama sobre la que estaba acostado y una punzada atacó su estómago. Estoy en un hospital, pensó. Pero su mirada se posó en la figura de Kory, quien estaba totalmente dormida en una silla a su derecha. Los ojos de la pelirroja se abrieron con pereza.

"Hola, Richard" su figura estaba simplemente desparramada sobre el asiento, pero si se había despertado con alguna molestia debido a su posición, no lo demostró en su cálida sonrisa

Los recuerdos de la noche pasada recorrían la mente de Dick como si fuera una película antigua, con partes arruinadas y algo estropeadas por el adormilamiento que aún dominaba su cabeza. Sin embargo, sólo tomó unos segundos hasta que su memoria hizo un montaje de la noche, la cena y, en especial, el callejón gris de Gotham, con aquellas luces anaranjadas. Su cuerpo en el suelo y la superficie pedregosa y fría. La pérdida de consciencia.

"Fuiste atacado y derribado por unos matones. Bárbara dijo algo sobre tráfico de armas por parte de Dos Caras" continuó Kory suavemente "el doctor vino hace unas horas y me avisó que tenías un par de costillas bastante dañadas. Hicieron una pequeña intervención y probablemente vas a sentir algo de dolor hasta que tu cuerpo se recupere totalmente, pero nada demasiado grave"

Mientras Dick intentaba incorporarse y era detenido por otro pequeño pinchazo en su torso, el cual se reflejó en su cara, Kory agregó "Pero necesitará que descanses, poco movimiento, mucho descanso" él hasta podía oír su sonrisa burlona

Del otro lado, Dick le dio una mirada de pesadumbre. Su humor se había tornado pésimo en esos escasos minutos que había estado despierto. Primero, porque se sentía un idiota por haber sido derribado por matones de bajo estándar, y segundo, porque de todas las personas, Kory se había quedado roda la noche a su lado, cuidándolo.

Él no tuvo tiempo de agradecerle, cuando Tim y Bárbara aparecieron en la habitación y, sorprendiéndose de verle despierto, se abalanzaron a saludarlo y expresarle lo extraño que había sido recibir la llamada de Kory para contarles lo sucedido. Tim sostenía en su mano derecha un globo flotante de color celeste brillante en el cual decía "¡Es un niño!". El menor se excusó diciendo que ya no quedaban de los globos normales, y lo dejó junto a unas flores en una mesita al lado de su cama. La risa que salió de los labios de Dick fue auténtica y le ayudó a poder liberar algo de la vergüenza. Tim y Barbara, sin embargo, no pudieron quedarse mucho rato, ya que una enfermera les informó no muy cordialmente que no era hora de visitas y que sólo se le tenía permitido quedarse a un acompañante.

Richard tuvo que quedarse en el hospital un par de días más, para que los médicos pudieran mantener un seguimiento más preciso de su condición y hacer los estudios que sean necesarios. La comida envuelta el film sobre bandejas de plástico y la monocromática paleta de colores, junto a la restricción de movimiento se habría llevado lo mejor de Dick, si no hubiese sido por Kory. Con su llave, le trajo de su departamento diferentes libros y pequeños juegos para hacer su estadía un poco menos tediosa, y Kory también era en sí una ávida conversadora, que, a pesar de nunca abrumarlo, siempre parecía tener algo que opinar al respecto de diversos temas. Estaba al día con bastantes sucesos actuales y compartía con Dick un discreto gusto por la lectura. Las horas podían pasar tranquilamente mientras ellos estaban entrelazados en su conversación, y Dick sentía cómo su atención hacía su compañera crecía, gradualmente, cada vez más y más.

Su familia lo visitó varias veces más al hospital antes de que pudiera ser totalmente dado de alta. La primera vez, aparecieron nuevamente Tim y Bárbara, acompañados por Jason y Stephanie, quienes habían traído unos chocolates, pero fueron gustosamente devorados por Jason cuando se enteraron que el estómago de Dick estaba todavía muy sensible para ese tipo de postres. Tim y Steph conversaron con él breve pero cálidamente y se retiraron con el grupo no mucho después. Al otro día apareció Alfred con Tim a su lado; el menor con otro globo flotante, que esta vez decía "¡Es una niña!" y el anciano con un tupper que sacó discretamente de la bolsa en su mano, el cual contenía finalmente comida decente. Alfred le aseguró que no sería muy agresivo para su estómago, y terminó su regalo con un sutil guiño. Tim le felicitó a Kory por el nacimiento de sus hijos y ella, mirando a los globos en forma de corazón flotando junto a ella, le agradeció el cumplido y le confesó que las hormonas del embarazo habían puesto a Dick súper irritable.