Malentendidos (Kalluto Zoldyck)

07. Mañana "tranquila"

La mañana ha llegado más pronto de lo normal.

Fue el primer pensamiento del joven asesino al despertar con ya el sol casi arriba, normalmente se habría despertado más temprano, pero el entrenamiento lo había dejado más cansado de lo que parecía, en realidad nunca se había percatado de lo desordenado que era su patrón de ataque desde ayer y trató de cambiarlo. Pero tanta aura lo agotó de todas formas.

Se sentó en la crujiente cama y movió las cortinas siendo golpeado directamente en la cara por el sol más brillante de lo normal ¿Será porque están en una montaña? No, él había vivido en una toda su vida. Decidió no preguntarse más él porque el horario parecía ir más rápido y vestirse para salir de una vez.

Pero su kimono no estaba donde él lo había dejado, le extrañó demasiado ya que no solía olvidar donde dejaba las cosas pero pronto cayó en cuenta de que alguien lo había sacado cuando definitivamente no lo encontró por ningún lado.

Lo que sí encontró fue ropa de niños... Normal, como de los que usa Killua, completamente en duda se lo puso, la parte de arriba le quedaba grande, pero era agradable, camino hacia su puerta y la abrió solo para ser golpeado por el olor casi desconocido de algo cocinándose.

"Oh, buenos días Kalluto" Y ahí estabas tú, en la cocina con lo que parecía ser un delantal, el asintió con la cabeza ante tu saludo algo avergonzado por despertar tarde "No creo que falte mucho para que el desayuno esté listo"

El volvió a asentir con su cabeza algo incómodo, era la primera vez que se veía en una casa tan... Hogareña con un miembro del Ryodan, no sabía cómo sentirse respecto a todo.

"¿Sabes donde dejé mi Kimono?"

"¿Hm?" Lo miraste con lo que sería total confusión y luego le sonreíste "¿No lo recuerdas? Esta mañana entré a tu habitación para preguntar si querías que lo lavara, así que.... La cosa es que dijiste que si"

Espera ¿Eso hizo? Estaba confundido, no recordaba nada de eso.

"Ah" Hasta que al fin recordó

————

"Hum... Kalluto, me pregunto si quieres que lave tu... ¿Yukata?"

El se quejó enterrando su cara en la almohada sin siquiera abrir los ojos

"Es un kimono, no un Yukata...." Murmuró con la voz amortiguada "Pero si, por favor..."

————

Ahora si podía estar avergonzado, no recordaba en absoluto ¿Tanto sueño tenía?

"Por cierto, deberías ir a darte una ducha, ayer no alcanzaste"

"Cierto..." El se dirigió a lo que sería al baño para ver por una ventana su ropa colgada "¿Entrenaremos hoy?"

"Creo que deberíamos tomarnos un descanso, seguiremos mañana"

"Esta bien" No podría estar más de acuerdo, era muy débil de su parte, pero nunca se había dedicado una tarde completa a entrenar una sola habilidad y mejorarla de forma estricta.

Su hatsu siempre fue cosa suya, simplemente aplicando todo lo que Illumi le había dicho en algún momento, pero incluso él sabía que le faltaba.

————

Tu suspiraste cuando él entró a la ducha, es bueno que no recordara la verdadera razón por la que limpiaste el Kimono, eras un desastre, fuiste a despertarlo y derramaste el jugo que tenías, al menos él no había visto nada.

Ahora con suerte no se te quemaba el desayuno, estabas atenta con eso por algo.

Después de todo, no cocinabas tanto por tu cuenta antes de venir a este mundo. Y con todo alimento extraño era difícil cocinar algo.