No Hay Vuelta Atras

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Las puertas se abrieron causando que estas rechinaran y llamara la atención de algunos invitados, muchos volvieron su mirada al frente al no saber de quién se tratara, pocos lo reconocieron. Eddward caminaba desfilando su enorme sonrisa, al cruzar junto a algunos invitados estos lo detallaron mejor, no podían negar que el joven adulto se veía elegante, algunas no pudieron evitar tener algún pensamiento lascivos con él y contener sus ansias mordiendo sus labios inferiores. No solo uno llego a pensar que se tratara de algún famoso, debido a su elegancia y al par de chicos que caminaban detrás como si fueran algún guardaespaldas.

— ¡Doble D! — Llamó una voz dulce que el mencionado reconoció al instante. Al voltear la mirada confirmando que sus cavidades auditivas no estaban equivocadas.

— Saludos Nazz — Saludó con cordialidad.

(***)

— Dime Doble D ¿ya pensaste en invitar a alguien para el baile? — Preguntó la rubia mientras caminaba junto a su amigo con dirección a sus casilleros.

— La verdad creo que me abstendré de asistir a la festividad de la escuela — Explico al detenerse en su casillero y abrirlo para depositar sus libros, su amiga camino un poco más y se detuvo a un par más de él haciendo lo mismo — Además, sabes que no soy un chico fiestero.

— Oh ¿enserio? — se mordió el labio dentro del casillero para que este no pudiera verla — ¿Por qué no vas con tus amigos? — Preguntó.

— Odiaría ser un pentágono en su cuadrado — Explico dejando a su amiga pensando a que se refería, tomándole no más un par de segundos antes de responder.

— Olvide que ambos salen con las Kankers — dijo la rubia recordando a la hermana del medio, con molestia decidió preguntar — ¿Y qué tal Marie? — Preguntó.

Edd se mantuvo en silencio por un momento, Nazz se preguntaba si la abra escuchado y antes de volver a hablar él respondió — No.

Nazz se quedo sorprendida por la seca respuesta que este dio, así que decidió indagar un poco en el asunto — ¿Por qué no? — Preguntó cerrando el casillero, él hizo lo mismo.

— Es... complicado — ¿Complicado? Esa fue la excusa que se le pudo ocurrir.

— ¿A qué te refieres con "complicado"? — Preguntó retomando su caminata.

Eddward se rascaba la nuca sin saber cómo exactamente explicarle su peculiar situación — Veras, llevamos una gran amistad desde hace tiempo, luego de que ella dejara de violar mi espacio personal — Nazz se rio recordando esos momentos — Comenzó a alejarse en el último año, pienso que ya se canso de mi o que se haya aburrido, yo... — tomo una bocanada de aire antes de continuar — La extraño — Soltó con pesadez.

Nazz observo a su amigo intriga — "Enserio los chicos son tan estúpidos" — Pensó — ¿y? — Edd la miro sin entender su pregunta — Por el amor de Dios Doble D — Soltó el aire que aun retenía en sus pulmones con frustración — Ella quiere que des el primer paso — Explico haciendo que se detuviera como si el secreto del universo le fue revelado. Se palmeo la frente con molestia, tomo su teléfono y marco el número de contacto.

— ¡Marie! Yo... — Se notaba nervioso, quizás el estado de valentía que tenía hace unos momentos se desvaneció.

Si no tienes nada que decir entonces... — Estaba por colgar hasta que Edd volvió a hablar.

— ¡¿Qui-Quieres ir al baile conmigo?! — Pregunto en voz alta llamando la atención de los presentes en el pasillo que dejaron de tenerle importancia y continuaron con lo suyo. El silencio rondo por unos segundos que parecían eternos para el joven de gorro.

Solo debo sonreírDonde viven las historias. Descúbrelo ahora