Era 2015 del siete de julio ¿Cómo lo sabía? Hoy era día de cobranza, el sector siete era el que debía más, ya hace un mes que no pagaba, me sorprendió aquel detalle, el sector siete solo era ocupado por hombres, mayormente eran uno de los más solicitado e incluso yo llegue a necesitar de sus servicios, aunque el sexo era bueno, dinero es dinero, y no me sorprendí, faltaba más de trescientos euros.
Cansado de esta situación, decidí enfrentarme contra él, para llevarme la grata sorpresa (aprecien el sarcasmo) de babyTim sobre el regazo de Jacob, coqueteando sobre él, el asco se posiciono dentro mío, las ganas de vomitar no faltaron y pensar que dormí con él. Ignorando eso, me acerque al pequeño babyTim.
- Bueno Baby, otra vez el sector siete está debiendo - hable tirando el dinero enfrente de él, el castaño dejo de besar a Jacob para verme, puso cara de inocente.
-oh...no sabía eso, es que al sector no le ha estado yendo muy bien- dijo con voz aniñada, se levantó de Jacob y se lanzó sobre mí- aunque. Podemos llegar a un acuerdo convencional - dijo abrazando sobre los hombros, con asco lo aleje de mí.
-ja, ja. Hablo enserio, o tu sector paga lo que debe o te rompo tus bonitas piernas- dije de forma seria, él se tensó y con nerviosismo comenzó a jalarme de mi polera.
-oh, vamos char, por los viejos tiempos solo...- hablo intentando besarme, estaba harto de su tonto juego. Lo tome de los tirantes y estampe contra la pared, el me miro con temor, no lo voy a negar, me encantaba que me mire así.
-Escúchame, no estoy para tus malditos juegos, o pagas lo que debe o te despides de tu vida- hable, el solo comenzó a sollozar y murmurar, casi susurrando la palabra: "Si, sí...". - buen Baby. - lo solté y me fui, Jacob me siguió se notaba molesto. Quizás frustrado.
- ¿Por qué hiciste eso? - pregunto de forma seria, yo solo lo ignore en busca de mi Yamakazi, cuando lo encontré me desilusione, ya no había. ¿En qué momento se habría acabado?, como sea, bote la botella a un lado para buscar algo más, solo había bebidas energéticas, maldita sea odiaba estar sobrio, más en horas de trabajo. Como sea, supongo que el Red Bull podrá darme las alas que necesito, sentí algo estrellarme contra la cabeza, maldito Jacob. Estaba furioso.
- Haber hijo de tu put-
- ¿Hijo de mí que, Charlie? -dijo, "oh mierda" solo pude procesar, enfrente mío estaba nada más que Adrienna D'angelo, la belleza oscura de la mafia, dueña de la exportación y venta de los productos negros de la zona sur de Europa, no se dejen engañar por su rostro hermoso o buen cuerpo y gusto fino, esa mujer era capaz de todo, más si decías una grosería enfrente suyo- continua Charlie, ¿hijo de que soy? - dijo sonriendo, Dios soy yo de nuevo.
- Eh, nada signora D'angelo. Solo hablaba con mi compañero Jacob ¿Verdad Jacob? - dije sonriéndole, el viejo asintió, más le valía. La signora solo sonrió, camino hacia donde estaba yo, vista arriba orgullosa e imponente.
-oh, mi querido Charlie- hablo acariciando mi rostro, con su cínica sonrisa pitada en su rostro hermoso. Fue una caricia linda y tierna, para amortiguar el dolor que siguió. Me había golpeado con el mango de su arma, solo sentía un fuerte dolor inundar mi mejilla y nariz, la sangre no se hizo de esperar, me agache por reflejo buscando un papel para detener el maldito sangrado, sentí el aliento de signora muy cerca mío- vuelve a mentirme de esa forma y tu nariz no será lo único que sangre- dijo para luego incorporarse, cuando levante la mirada ya hacia sentada en los sillones.- bueno, mis queridos trabajadores mi visita no es por gusto, realmente estoy aquí por negocios. Oh, gracias Jacob- dijo tomando la copa- como iba diciendo, esta visita se debe a un negocio ¿Se acuerdan de la mercancía de FSK? - dijo sonriendo, temí en ese instante.
- Es la del lunes ¿no? - dijo Jacob.
-Sí, la del lunes, la del lunes que intersecto la policía esta mañana- dijo aun siguiendo sonriendo ¿Cómo lograba esa mujer no perder la compostura? voltee a ver a Jacob deseando una explicación Jacob, ¿qué estupidez hiciste? - ahora, uno. No, mejor dicho. Jacob ¿Que paso? - pregunto sonriendo, el desgraciado solo sonrió nervioso, había vuelto usar consumir el producto.
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A través de Elle
RomanceMi definición de vida siempre fue en dos partes, placer y trabajo. Esto se podría oír cliché, pero no había más allá de eso. Trabajar para la mafia era lo único bueno que había tenido en mi espantosa y jodida vida, hasta que por una estupidez, fui q...