𝒀𝒐𝒖 𝑨𝒓𝒆 𝑴𝒚 𝑫𝒆𝒔𝒕𝒊𝒏𝒚「𝑱𝑱𝑷」

𝟷𝟸

JaeBeom apenas llegó al primer piso se encontró con los demás chicos, cada uno estaba en lo suyo, menos los tres maknaes que como siempre, jugaban vídeo juegos.

–Y... ¿Que paso aquí, Hyung? –Habló Jackson mirando al líder.

–¿De que hablas? –Preguntó incrédulo mientras tomaba una cajetilla de leche de fresa, para beber el contenido.

–No te hagas el pendejo, JaeBeom. –Insultó Mark. –YuGyeom y BamBam subieron a buscarte a ti y a JinYoung, y los traumatizaron apenas entraron a la habitación de JinYoung. –Termino de hablar haciendo que JaeBeom escupiera su leche de fresa en el rostro de Jackson.

Este quedó neutro, con los ojos cerrados, esperando que una alma generosa le ofreciera una toalla o algo, pero nada.

–¿Q-que fue lo que vieron precisamente? –Preguntó JaeBeom volviendo a tomar de su leche de fresa.

–Bueno... Vimos a dos chicos cansados durmiendo en la cama de JinYoung porque acababan de hacer cositas sucias. –Habló Mark, a lo que JaeBeom volvió a escupir su leche de fresa en el recientemente limpio rostro de Wang.

–¡Hyung! –Grito Jackson, limpiando rápidamente su rostro, tomando un vaso que YoungJae tenía en las manos, tomando el contenido y escupiendolo en el rostro de JaeBeom.

–¡Hey! –Grito este, tomando de su leche de fresa escupiendolo nuevamente en el rostro de Wang.

Jackson inmediatamente lo imitó, escupiendo en su cara.

–¡Detenganse ahora, estúpidos de mierda! –Grito Mark, quien estaba en medio de aquella asquerosa guerra.

Ambos chicos miraron a Tuan con sus mejillas llenas de sus respectivos líquidos, escupiendo al mismo tiempo sobre el rostro de Mark.

–¡Ahh, hijos de puta! –Grito limpiando su rostro. –Se arrepentiran. –Habló levantándose de su lugar, yendo a la cocina.

El líder y el Hongkonés reían mientras chocaban sus manos.

–¡JaeBeom! ¡Jackson! –Grito Mark saliendo de la cocina, tomando el grifo de agua extensible.

La mirada de ambos chicos demostró pánico, intentaron subir a sus habitaciones en un intento fallido, siendos empapados por Mark.

–Idiotas. –Murmuro el mayor cerrando el grifo de agua. –Ustedes limpiaran, me voy a dormir.

Mark masajeo su entrecejo y subió con claras intenciones de ir a descansar, deteniéndose en seco frente a la puerta de JinYoung, escuchando sollozos desde dentro.

Algo desconcertado tocó la puerta suavemente, esperando una respuesta afirmativa para dejarlo pasar. Al cabo de unos minutos esta se escuchó.

Mark apenas abrió aquella puerta de madera, vio a JinYoung recostado en su cama, mostrando una sonrisa, pero sus ojos claramente mostraban dolor. Entró cerrando la puerta detrás de si, no permitiría que nadie viera a JinYoung tan destrozado.

–¿Pasa algo, Jinnie? –Preguntó sentándose junto al nombrado, acariciando sus húmedas mejillas, producto de sus lágrimas anteriores.

–Nada, Markie. –Negó. –¿Deberia pasarme algo? –Preguntó con una sonrisa temblorosa, el nudo en su garganta lo estaba matando.

–JinYoungie... Algo te pasa, te conozco lo suficientemente bien como para darme cuenta al instante.

–Markie... –Murmuro con la voz entrecortada. –Markie estoy torturandome mentalmente, Markie necesito un abrazo. –Habló dejando el nudo en su garganta soltarse, dejando a todas sus lágrimas salir.

–Aquí estoy para ti, cariño. –Consoló Mark abrazando al chico, quien enseguida correspondió el abrazo, dejando salir todo su dolor.