Collioure

Prólogo

Caos, pero a la vez silencio.
Todo de cabeza. ¿Sirenas?
No siento las piernas...
¿Nora? Inconsciente... Creo que ya no respira.
¿Qué ha pasado?
Siento como mis cuerdas vocales vibran en busca de auxilio, pero no logro escuchar lo que grito.
Comienzo a sentir un agudo dolor en mi espalda, como si una aguja enorme me atravesara hasta el abdomen
¿Cómo he llegado aquí?
Mi vista es intermitentemente borrosa, las luces parecen más estrellas que focos.
Escucho una voz, a la que contesto divagante.
Un uniforme, una camilla, una sábana blanca y luego una inmersiva oscuridad que me tragó con rapidez.

Eso es lo que recuerdo de aquel día, el día que perdí a mi hermana. Todo por un purgado en un Maserati rojo, el cual decidió que llegar con rapidez tenía más valor que una vida, la vida de Nora.