Lee presionó el botón de la radio y con todo el odio que tenía le dijo al extraño las siguientes palabras.
Lee: Estás muerto, carajo. No sé quién seas, pero te mataré, ¿entiendes?
Hombre: Se que lo harás. Ella sabe que lo harás. Despídete.
Clem: Hasta luego.
El hombre se quedó en silencio procesando lo que ocurrió hace solo un par de segundos.
Lee: Más le vale que no lastime. Juro que... —guardó silencio y colocó la radio en su pantalón.
Kenny: No te preocupes, amigo. La encontraremos.
Los cuatro escucharon gruñidos de caminantes y al mirar la puerta varios de ellos entraron al refugio nuclear y se acercaron a la puerta de la morgue.
Kenny: Nos quedamos sin tiempo. —dice mientras cierra la puerta antes de que entren—. Todos nosotros nos aseguraremos de que nada entre. Intenta buscar una forma de sacarnos de aquí.
Lee buscó por la morgue alguna salida. Encontró un ascensor, pero abrir las puertas era imposible usando las manos, así que debía encontrar una herramienta o algo que pudiera ayudarlo. Revisó cada cajón y mueble del lugar. En un gabinete encontró un abre pechos que usó para abrir las puertas, llamó a sus compañeros y todos entraron.
Christa: Iremos lo más silenciosos posibles y veremos si podemos llegar a un piso vacío o incluso el techo.
El grupo subió por las escaleras del elevador, tuvieron que apegarse a ellas por un par de segundos cuando un caminante cae, pero al menos llegaron a la azotea sanos y salvos. Ya arriba se acercaron a la orilla y vieron a todos los infectados caminando por las calles.
Kenny: ¿Recuerdas cuando Savannah estaba vacía?
Christa: Esos bastardos de Crawford hicieron algo bien, supongo. —dijo recordando a ese grupo.
Había que admitir que ese grupo de Savannah conocido como Crawford había manejado bastante bien la situación al contener a los caminantes, pero la manera de hacer las cosas era algo que no les agradaba a los sobrevivientes tal vez por haber cuidado niños y/o una persona. con una enfermedad en el corazón. Cualquiera que fuera la razón hizo que parte de su moral estuviera intacta y jamás podrían hacer algo tan atroz.
Kenny: Debe haber miles. —murmura respecto a los caminantes.
Omid: No nos siguieron hasta aquí, ¿o sí?
Kenny: En verdad lo parece.
Lee se quedó callado pensando que podrían hacer para escapar de la situación en la que se encontraban.
Lee: Tal vez podamos esperar una oportunidad.
Omid: Podríamos esperar un largo tiempo.
Kenny: Aun así, Lee tiene razón para tomar el tiempo e irnos. ¿Alguien sabe que tan lejos y en qué dirección queda la mansión? Quizás debamos comenzar allí.
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La Historia de Lee y Clementine.
FanficEsta es una historia basada en el videojuego de The walking dead que trata de lo que habría pasado si Lee Everett no hubiera sido mordido por un caminante.