VENENO

Suplicio.

Hola mis criaturas perdón por desaparecer tanto tiempo no tenía casi inspiración, pero les traigo este chulo capitulo que espero sea de su agrado sin más espero que disfruten su lectura.

¡ADVERTENCIA! Este capítulo tiene contenido sensible para muchos, leer bajo su propio riesgo, no fomento la violencia ni nada por el estilo es todo producto de mi imaginación.

Los personajes le pertenecen al maestro Akira Toriyama.

Pov. Vegeta.

El pánico se apoderada de mi mente, no me recuerda, no me recuerda, no me recuerda; como es posible.

Ordenó que saquen a Bulma al pasillo, intenta entrar pero le es imposible.

- ¿Qué diablos pasó? ¿Porque no me recuerda? Contesta maldita sea.- le doy una patada a Zorn el aire escapa de su cuerpo escucho a Lazuli gritar más no me interesa, sigo pateandolo como si con eso logrará respuestas; llega un momento en el que uno de mis hombres me aparta dejo a Zorn descansar para que comience a hablar...

- Fue... Tú... fue...tu culpa, tú... Fuiste... Tú... Fuiste él culpable... de... todo.- Agacha su cabeza al suelo para que no vea su dolor.

- Explícate.- Tomo su cabello y alzó su cabeza, se queja pero lo tomo con más fuerza.

- No sé que hiciste... pero cuando la encontré, ella... estaba... grave, quedó en coma... más de dos años, casi... la... matas, eso es algo... que yo... que yo... nunca te voy a perdonar.- Suelto su cabeza y camino a otro lugar de la habitación.

- No fue mi culpa, ella estaba bien, pero se escapó, y yo no necesito nada mucho menos que me perdones.-

- Hiciste que mi hermana sufriera un infierno, la golpeaste, la humillaste, y lo peor, la violaste maldito enfermo.-

- Enfermo yo, por favor, si hablamos de enfermos violadores tú ocupas el primer lugar.-

- Cállate Vegeta, ¡CÁLLATE!.-

- ¿A qué te refieres?-

Escucho la voz de Lazuli como si fuera un susurro inaudible, volteo a ver a Zorn y el con la mirada me súplica que no diga nada pero mi mente empieza a crear algo macabro. Ordenó que amordacen a Zorn y que metan a Bulma a la habitación.  Ya estando mi mujer adentro la observó, quisiera deleitarme con su piel, su voz pero no hay mucho tiempo.

- Bulma dime algo, ¿Estás dispuesta a sacrificarte por tu hermano?.-

- ¿Que clase de pregunta es esa?.-

- Responde hermosa, ¿Estás dispuesta?.-

- Que insolente, no puede decirle esas palabras tan llenas de pecado a una religiosa.- Ella no recuerda que no soy muy paciente, saco la hermosa arma que siempre traigo conmigo, cargo cartucho y la coloco en la cabeza de Zorn.

-HERMOSA, por favor contesta.- Intento contenerme no quiero que ella se asusté.

- Claro que daría mí vida por mí hermano.-

- ¿De verdad? ¿Aunque este sea un violador?.-

- ¿De qué habla?.-

Zorn intentaba hablar negando todo lo sucedido, pero yo seguí arrojando mi veneno.

- Que mal Zorn, tu hermana está dispuesta a sacrificarse por tí y tú nunca le haz contado ese horrible secreto que tenemos los tres.- Zorn me observaba con odio.

- Veras Bulma esto que te voy a contar paso cuando tú eras más pequeña...

Flashback.

Una tarde como empezaba a ser mi costumbre hiba a visitar a tú hermano a su casa el era mi amigo, tus padres se alistaban para salir de viaje y yo me iría unas horas más tarde, después de que tus padres se fueran, a Zorn le dió un ataque de esos que acostumbraba a tener intenté calmarlo pero se volvió loco...