Amor Sangriento |Alucard x Reader| |Hellsing|

✔Capitulo: 02✔

Seras Victoria

- ¿Uh? ¿Esto es...?

Miro a mi alrededor, pero todo está absolutamente en blanco, de pronto siento que el piso se rompe y del sale una multitud de personas, o más bien ¿Zombies? Ay por Dios.

- Una chica policía -dice todos al unísono. Tengo miedo.

- ¡Una oficial! -dice otro.

- ¡Bragas! -que pervertido.

- ¡Un moño! -dice otro más.

Grito muy fuerte y me voy corriendo como si mi vida dependiera de ello, estoy asustada, no sé dónde estoy, ellos me vienen persiguiendo, corro para allá me siguen, corro para acá me siguen, corro por allí me siguen, es que no me piensan dejar en paz. Me quiero ir de aquí.

- ¡Tengo miedo! ¡Me van a matar! -grito mientras corro por mi vida.

Cuando miro para atrás para verlos, sin darme cuenta choco con alguien, ojalá no sea con otro zombi por favor Diosito. Levanto la cabeza asustada y me encuentro con un hombre alto, con ropas que creo que son victorianas de los tiempos antiguos, botas de montar, una gabardina roja, un sombrero del mismo color y unos lentes de sol.

Este señor sí que da miedo... pero también me recuerda a alguien.

- Mujer policía, ¿Qué se siente estar muerta? -dice ese hombre con una sonrisa diabólica.

¿Qué? ¿Cómo que muerta? ¿Ya morí? No, esto debe ser una pesadilla de la cual pronto despertaré.

- Pero, elegiste...

Miro mi pecho por instinto y me sorprendo al ver el agujero que tengo, lleno de sangre. Y luego lo miro.

- El camino para convertirte en una draculina.

- No puede ser... -digo asustada mientras él se acerca a mi cuello. Iba a morder mi cuello, pero todo se vuelve negro.

Me levanto sobresaltada de la cama y me fijo en mi alrededor. Es una habitación bastante grande, con muebles en el centro, una cama matrimonial, una gran alfombra que cubre todo el piso, un almario grande y lo más raro es que no hay ventanas, sino lámparas.

¿Eh? ¿Esta no es mi habitación? ¿Dónde estoy?

- ¿Qué... lugar es este?

Miro mi cuerpo y levanto mi camiseta, veo que no tengo el agujero que tenía en el sueño, lo sabía, solo era un sueño, pero ese hombre se vio tan real. Qué raro.

Miro a un lado y lo veo ahí, sonriendo...

- ¡¡AAHHH!! -grito y él se levanta de la cama. Me ha dado un gran susto.

- Mujer policía, ¿Qué se siente ser una draculina? -me dice sonriendo.

¿Qué? ¿Draculina?

Busco un espejo y me miro mis dientes, hay dos grandes colmillos. No puede ser... Soy igual que S...

- ¡¡Colmillos!! -digo alterada.

- Baja la voz, mujer policía -oigo decir a una mujer rubia de ojos azules y con un puro encendido en la boca sonriendo, atrás de ella venia creo que su mayordomo- no pierdas tu elegancia inglesa. Eso, a pesar de ser una draculina.

- D-Draculina... -digo sin creerlo- Eeh... a propósito ¿Dónde estoy?

- En el ejército de la Iglesia Real, también conocido como la Agencia Hellsing. Una guarida de monstruos que aniquilan monstruos.