Capitulo 3

42 5 3
                                    

 

*Narra ___*

Volvía de hacer la compra cuando vi que aún no había llego Lizzy. Preparé algo de pasta y me fui al salón a ver la tele junto con Kero.

A las tres menos cuarto llegó Lizzy

-Ey ey ey! Ya he vuelto.

-Sí que se ha alargado la visita a Sara eh. Ahí tienes algo de pasta, yo ya he comido porque tengo que hacer un trabajo con una chica de mi clase; por cierto cierra la puerta no has cerrado.

-Eh sí bueno… ___ tengo que decirte una cosa… Bueno, me he encontrado con Rubius y… le he dicho que tú y yo estábamos buscando unos compañeros de piso ya que somos nada más que dos y esto es muy grande entonces… pues como sabes que me gusta Rubius se lo he dicho sin consultarte y ha dicho que si y… la mudanza empieza hoy. PERO POR FAVOR NO ME ODIES POR NO HABERTE PREGUNTADO POR FAVOOR!

-¿¡QUE HAS HECHO QUÉ?! Lizzy! Yo no quiero tener a más gente viviendo aquí! Joder, lo has hecho muy mal, no sé al menos un mensaje.

-Por favor… hazlo por mí…

-Ts…-Hinché los mofletes y, acto seguido resoplé.- Está bien… pero a cambio… Kero se podrá pasear por la casa tantas veces como quiera… no le insultaras y… no me regañarás cada vez que ponga la música muy alta o coja tu ropa…

-Sí, sí vale…

-¿Y tiene mucho que meter aquí?

-No… por eso también acaba hoy la mudanza. Pero… no solo es Rubius también viene Mangel.

Hice una mueca, cogí un tazón con cereales y me fui a mi habitación.

-Lizzy… ¿has visto a Kero?

-¿No está contigo?

-No… LIZZY POR FAVOR DIME QUE ES UNA BROMA.

-No, no lo es. ¿Se habrá escapado?

-No no no no no!-Me puse a llorar.-

-No llores seguro que… ¡Claro! Cuando he dejado la puerta abierta!

Me levanté del suelo y salí corriendo a la calle.

-¡KERO! ¡KEROO!-Grité por todas las calles.-

De repente me sonó el móvil.

-___ vuelve a casa seguro que aparece, han dicho en las noticias que dentro de poco habrá una tormenta de verano.

-Me da igual, como si pillo una pulmonía, tengo que encontrarlo joder.

Al colgar, empezó la tormenta. Llovía realmente fuerte y no veía bien por donde pisaba y, me caí a un charco. Me llené de barro.

En total estuve una hora buscándolo hasta que me cansé e intenté volver a mi apartamento.

-Lizzy no lo he podido encontrar.-Dije entre lágrimas, llegué al salón y estaban Mangel y Rubius.- Lizzy…-Me tiré a sus piernas para que me abrazara y me consolara.

-¿Qué te ocurre, ___?-Me preguntó Rubén.

-Mi gatito… Kero, se ha perdido.-Dije todavía llorando.-

-Es un gatito como este?

Levanté la cabeza, Rubén estaba acariciando a un gatito de un mes, amarillo con rayas negras, como un tigre. Ese era Kero.

-¡Kero!-Me abalancé hacia Rubén y lo abracé llorando.- Gracias, de verdad gracias.

-Eh…no es nada tranquila.-Me dijo esbozando una sonrisa.

*Narra Rubén*

Iba hacia los pisos de ___ y Lizzy junto con Mangel.

-Ey tío crees que Lizzy nos ha invitado a vivir con ellas porque me quiere?

-Jajaja… no sabría qué decirte jajaja.

Entramos en el portal y, en el hueco de las escaleras vi a un mini tigre temblando por el frío.

-OOOOOOYYY MIRA QUE COSITA TAN MOOONAAA AAAAW.

-SIIII ES SÚPER MONOOO POR FAVOR!

Mangel se acercó a él y lo cogió, entonces le puso su chaqueta encima para que dejara de temblar.

-Parece un gato doméstico. A lo mejor se le ha escapado a alguien que viva aquí.

-Sí, me parece que sí.

(…....................)

Cuando _____ me abrazó sentí que me ponía rojo. Vaya creo que realmente me empieza a gustar esa chica. La conozco desde hace poco pero es como si estuviéramos destinados a conocernos.

Sobre las diez ya lo teníamos todo listo. Mangel tenía su habitación, yo la mía y todos vimos las normas: desayunamos, comemos y cenamos todos juntos en el salón. Nada de despertar a los demás si te has despertado muy temprano y cosas así.

Cuando eran las doce me fui a acostar ya que estaba cansado por que había tenido un día ajetreado, pero me encontré una sorpresa; el gatito de ____ estaba dormido sobre mi cama. Decidí cogerlo para llevarlo a la habitación de ____.

-____ soy Rubén, ¿puedo pasar? Tu gato se ha colado en mi cuarto y vengo a dejártelo a ti.

No respondió. Volví a llamar; nada. Así que decidí entrar en su habitación. La pobre estaba dormida.

Fui a dejarle a Kero encima de su cama pero, de repente, ___ saltó sobre mí.

-¡AAA! LADRÓN NO CONSEGUIRÁS ROBARME A MI GATITO.-Decía, le miré a la cara, estaba dormida; ¿es que es sonámbula?- Gracias a Rubén lo he podido encontrar, él es buena persona no como tú que me lo quieres robar.

De pronto se dejó echar más de lo que estaba sobre mis brazos, yo no la cogí bien y nos caímos al suelo sobre su alfombra. Se quedó abrazada a mi y se durmió así que, como si me movía la despertaba, aproveché la oportunidad y me quedé a dormir en su habitación, junto a ella, abrazado.

Trust MeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora