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"Esto recién comienza..."

Verano de 1950

-Hija, Grace, ya deja de dar vueltas que tenemos que irnos- decía Rose ya cansada de insistir tanto-

-Mama, ya soy grande, puedo cuidarme sola, están las mucamas y...-

-Ya hablamos de esto.- dijo Rose dando fin al tema.

Grace se levantó de su enorme, si que era enorme, cama para dirigirse a su tocadiscos rosa, típico de una niña mimada que cumplen sus caprichos, pero ella no era así.

Familia Levine alias "La familia rica del pueblo" ¿pueblo? de todo Estados Unidos, ellos si eran conocidos, afortunados, y no omitamos el pequeño detalle de que cada semana, por lo menos una pagina en el diario o revista, en ese momento la mas famosa "Life", tenia por lo menos unas cuatro carillas dedicadas a cada cosa que hacían:

"Los Levine recibieron el año en la mansión de los Tyson..."

"Los Levine y sus dos hijas, Bea y Grace Levine irán de viaje..."

Para resumir, cada paso que daban se transformaba instantáneamente en una nueva noticia, chisme y una hoja de revista.

-Maldito viaje, maldito vestido...-

-Señorita Levine - espetó Torie, una de las mucamas- no haga escandalo, es solo un viaje-

-Es que no entendés. ¿Por que no puedo ser como ellas? - decía Grace mientras miraba a unas niñas...mas bien adolescentes de su misma edad siendo perseguidas por unos chicos, obviamente de su edad- ¿Por que no puedo ensuciarme sin que alguien esté tomando una fotografía y luego ser castigada por La Señorita-quiero-una-hija-perfecta?-

-Grace...- alargó la mucama.

-Ya se, ya se- dijo Grace dando fin al tema mientras dos mucamas se preparaban para peinarla. En realidad, no quería darle fin al tema, Torie era su amiga, claro que sus padres no sabían, sino la echarían a Torie y Grace no saldría de su habitación ni para tomar un vaso de agua... cierto, a ella se lo daban con bandeja y todo servido, en fin, las dos mucamas eran cómplices de Rose, su madre, y cada "cosa que Grace hace, cada cosa que me cuentan", esas fueron las palabras que Grace había escuchado salir de la boca de su madre, y no lo decía porque si, realmente cada cosa que hacia era buchoneada a sus padres.

-Auch...-se quejaba Grace mientras la peinaban-

-Grace ¿que te dije que las quejas?- dijo una voz llamada "Rose".

-Maldita s...-

-¿¡Y de las maldiciones!?- dijo Rose enfadada. 

****

-Es hermoso- dijo Grace embobadisima por un paisaje, que contenía unas cascadas, un muelle, y un par de adolescentes nadando y haciendo monerías como las que solo ellos saben hacer. -¿Podemos bajar para que haga un par de fotografías?- preguntó-

-Ya estamos por llegar Gracie- así le decía su padre- tan solo en unos minutos llegamos... mejor dicho, mira a tu derecha, esa será nuestra casa por un mes.- dijo John.

Mas bien era una hiper-mansión, tenia dos pisos, y no evitemos decir que era todo de "alta gama", nada trucho, cada cosa era de un diseñador diferente súper conocido y admirado en el mundo.

Eran las 16:33. Grace no hacia nada mas que querer escapar, nada fuera de lo común.

-Papa, ¿puedo ir al muelle?- dijo Grace a su padre, claro, con el tenia una buena relación.

-Solo vuelve antes de las 5- dijo su padre.

-¿5 a.m.?- dijo burlándose ella, recordando cuando escapo a esa misma hora con una amiga...bueno, en su momento era su mejor amiga, Steph, la cual ella no ve desde ese dia, ustedes me entienden.

-Grace...-dijo su padre entre una carcajada- apúrate porque no te queda mucho tiempo-

Grace no había perdido oportunidad para hacer unas foto con su cámara rolleiflex, en ese momento la mejor de la década que recién empezaba, claro, era su único escape, además de diseñar ropa, ella realmente amaba eso.

Se saco su vestido entre carcajadas porque se imagina lo que diría su madre si la ve así, quedando con lencería a vista de todos, bueno, de la persona que apareciera. 

Se lanzó en una especie de ""bomba"", lo que siempre había querido hacer, lo que no se esperaba era que la parte superior de su lencería se escaparía de ella de repente. 

Grace escuchaba voces adolescentes que se acercaban, pero no les dió importancia, estaba demasiado desesperada buscando su lencería, aunque de vez en cuando largaba alguna risita, no podía creer lo que le estaba pasando. Las voces se acercaban, ella se desesperaba y se reía cada vez mas.

"Aparece, aparece"- decía ella rogando que apareciera su brasier.

-¿Buscabas esto?- dijo una voz potente y gruesa detrás de su oído.

Grace se desesperaba, no era común que un hombre viera a una mujer sin estar casados.

-Dámelo- se quejó Grace sin darse vuelta, tratando de taparse.

-Querida Señorita Levine- dijo el- ¿te puedo decir Lev? realmente me gusta como suena- dijo el desconocido- bueno, ¿en que estábamos? ah, si, por supuesto, aqui tienes.- dijo devolviéndole su pertenencia.

-¿Que clase de caballero hace eso?- dijo Grace histérica por la situación que acababa de vivir, mientras trataba de acomodarse.

-No soy un caballero, soy Luke.- dijo el- Luke Hemmings. ¿Que quieres? ¿Que te sirva tu lencería en una bandeja como todo?- dijo Luke soltando una risa.

-"Luke Hemmings"- dijo Grace subiendo al muelle para regresar a su mansión por un mes.- Idiota, Idiota...- se quejaba ella.

-Tu madre no estaría muy orgullosa de que su hija diga ese tipo de palabrotas.- dijo esa voz, ahora conocida.

 -Aléjate no te conozco- respondió Grace

Luke la acorraló contra uno de los soportes del muelle.

-Esto recién comienza- dijo Luke

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