Desde pequeña sakura a amado a quien es su esposo, ahora se encontraba casada con el hombre que amo toda su vida, tenia una preciosa hija a la viva imagen de su esposo, cada gestos su ternura, los rasgos físicos, de el se hacían notorio en la pequeña niña: Sarada Uchiha a una edad precoz despertó su técnica heredada.
Su padre se había ido a una misión especial a largo plazo; la guerra ya había terminado pero los peligros latentes seguían azotando la aldea oculta de la hoja, Sasuke para proteger a su familia y la paz en la aldea merodeaba los lugares más bajos y oscuros del mundo buscando las amenazas y peligros que permanecían latente. Sakura su esposa estuvo de acuerdo y aunque no lo estuviera no tendría otra opción que aceptar la decisión de sasuke de proteger el mundo en las sombras. Sasuke se perdió los primeros pasos de su hija, cuando mudaba sus tiernos dientes, su primer día de clases en la academia, la mayoría de sus fiestas de cumpleaños.
para ella era muy duro cuidar de sarada sola, aunque siempre contaba con sus amigas, que la apoyaban en todo lo que ella necesitaba especialmente cuando surgía una emergencia en el hospital, sakura con gran tristeza dejaba a su hija con Hinata, una mujer fuerte y de carácter suave y decidido, la esposa de Hokage, criaba a dos pequeños con la paciencia y amor que una familia debería tener, no quería ser una carga para la mujer, molestar era lo último que quería hacer, ya era suficiente cuidar de dos pequeños.
Los turnos en el hospital le eran largos, aburridos llenos de papeleo, aun así ella amaba su trabajo, amaba cuando atendía a sus pacientes y ellos le regalaban una sonrisa y los agradecimientos, ellos necesitaban de ella, una mujer inteligente hermosa y con un gran corazón.
Sakura al parecer que lo tenía todo se sentía sola, por casi 12 años luchaba diariamente por criar a una niña sola, mantener la casa limpia, trabajar turnos dobles y hasta triples para mejorar la calidad de vida de los pacientes. Extrañaba a Sasuke se sentía sola, es una mujer joven, con un cuerpo que cualquier hombre se volvería loco, las flores y cartas de hombres enamorados llenaban la entrada de su oficina, todos en la aldea sabia que estaba casada pero la ausencia de su esposo no les pasaba desapercibido, además de la poca importancia de su matrimonio, las invitaciones y declaraciones de amor eran constante, pero ella les hacia caso omiso.
Además de su trabajo como madre, doctora y directora del hospital había un trabajo que era irregular, constante y necesitaba de mucha atención:
Consejera del Hokage.
En los asuntos importantes y que necesitan atención, su antiguos amigos se reunían para decidir cual era la mejor opción para tratar la emergencia.
En esa ocasión sakura visitaba la oficina del Hokage frecuentemente, le hacia chequeos médicos de manera constante, se encargaba mantener su salud. El idiota del Naruto se saltaba las comidas, no dormía durante días por el duro papeleo, sakura sabia que aunque Naruto estaba cumpliendo su mayor sueño no era la mejor manera de hacerlo, no regresaba a casa por días, eso deterioraba su salud, sumándole a eso que había estado enfermo por el chacra de Kurama, fue una dura etapa en la vida de todos; sakura le seguía dando seguimiento con medicina, era una labor constante pero todo por el idiota de su amigo.
Toco la puerta de la oficina y Naruto le dio su autorización de su entrada
— Hola Sakura no tienes la necesidad de llamar a la puerta cada que vez que vengas — con voz cansada y apagada, Sakura le dio una sonrisa cálida, Naruto creyó recordar la sonrisa dulce que su madre le brindó cuando la conoció.
— por mucho que seas el Hokage Naruto, no puedo entrar en las oficinas de los demás sin preguntar ¿acaso ya se te olvidaron los modales?— el hombre bajo la mirada, no quería un sermón, paso toda la semana arreglando los preparativos de examen de graduación de los futuros Genin.
— ¡Bien! ¡bien! vengo a ... — Naruto la interrumpió
— ya, ya lo sé el tratamiento — dijo asqueado
— si no fueras tan irresponsable no tendríamos que pasar por esto, Sarada estará esperándome en casa— se sentó de golpe en el sofá que se encontraba en la oficina, sus pies la estaba matando. Acarició su cuello suavemente y para aliviar la tensión de esa parte del cuerpo.
— Sasuke a vino a reportarse — soltó de golpe
—sasuke...— con tono triste pronunció el nombre de su esposo.
— le pedí que se quedara, pero...— buscando palabras para reconfortar a su amiga
— No, no Naruto yo... — el Hokage se levanto y toco su hombro levemente, el sabia que nada iba a poder consolarla. Ese fue su limite, aun Naruto a su espalda, sus lágrimas salieron por si solas, trato de ahogar su sollozos, se sentía devastada. Sasuke solo tomaría un maldito minuto saludarla o por lo menos contestar sus cartas.— dime ¿es la primera vez que vuelve a la aldea?— el negó con la cabeza,
— Sakura — con un susurro la llamo Naruto, la tomo fuertemente del brazo y la atrajo a su pecho, se sentó lentamente aun con sakura.
Después de unos minutos que se hicieron eterno, el dolor en el pecho de sakura se volvió mas soportable, pensar en sasuke y en su negligencia como padre le destrozaba el alma.
— soñé con brindarle una familia, el amor que desde pequeño se le negó, borrar los años de amargura— sus lágrimas manchaban su rostro — demostrar que el amor es el mejor camino para vivir, y que la venganza sólo envenenaba y carcomía el alma.
— tendrá sus motivos, su matrimonio tiene a Sarada y eso lo hace fuerte
— sasuke y yo nunca nos casamos — hizo una pausa para decirle la verdad — solo tengo a Sarada conmigo.
— sakura yo... — naruto se acercó a sakura, su cabello rosa lucía preciosos como siempre, su piel blanca estaba manchado con el maquillaje que se había corrido y a pesar de eso creyó que era la mujer mas hermosa que había visto en su vida. Si fuera su esposa no la dejaría sólo ni un solo día. Siempre con su ternura y su fuerte carácter hizo que se enamorara de ella, desde muy pequeño siempre queriendo llamar la atención de la chica siendo en todo en vano, su matrimonio resultaba un fracaso, Hinata solo le entregaba monotonía, extrañaba las misiones con el equipo 7, aun así reprimió sus deseos y su amor por su mejor amiga para que ella y su amigo fueran felices, pero nunca imagino que su mejor amigo abandonaría y haría a un lado la mujer que dejo ir para que ella fuese feliz a su lado.
Velando por la felicidad de ella se hizo a un lado, un gran error que jamas se le iba a perdonar o olvidar.Levanto el tierno y suave rostro de sakura, la miro con anhelo, teniendo cerca sus suaves labios.
Tomo valor y por primera vez en su vida pero no la ultima.
La besó.
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Comienzo
AcakNaruto el séptimo Hokage luchara por el amor que perdió hace muchos años.