Cosas sobre Akari

««Toru»»

««Toru»»

Uchiha Toru era una persona que le gustaba el silencio, por eso se decidió separarse de su equipo al momento que llegaron a la aldea. Le gustaría descansar después de esa molesta misión pero sabia que no lo lograría en su casa, por ello decidió caminar hasta encontrar un lugar adecuado

Veia a los niños jugar a las atrapadas entre ellos, sin ninguna preocupación de lo que podría suceder afuera. A Toru le gustaba obsérvalos, le gustaba verlos con una sonrisa, verlos disfrutar en su corta vida antes que llegara el momento de saber lo que le rodeaba

Cuando pasaba por el parque no pudo evitar detenerse al observar como tres niños rodeaban a otro infante que se encontraba agachado ocultando su rostro entre sus piernas. Sin dudarlo se acerco

-Mírenla como llora ¡De seguro es por su gran frente! -Señalo uno de ellos mientras soltaba una carcajada.

-El color de su cabello es feo -La unica niña del grupo se acerco tomando un mecho del cabello rosado del la infante quien se alejo a sentir que tomaban su cabello

-D-Dejenme -Casi susurro. Al estar tan solo unos cuantos pasos, Toru se dio cuenta que era una niña, las lágrimas rodaban por su mejillas ante las burlas de los tres

-¡Frentesota! -Exclamaron señalando la frente de la niña

-¿A estas edad ya los niños están molestando? Vaya que problema -Se posiciono tras de ellos mirándolos con una ceja arqueada, los cuatros lo miraron, una asustada y tres molestos

-¿Y quien ere tu? -Hablo el mas robusto del grupo, el pelinegro casi bufo ante el intento brusco que habia usado el niño

-Soy el que llamara a sus mamás si no se largan ahora mismo

-Eso no nos asusta -Lo señalo la pequeña molestia, pero sus dos amigos se miraron dudosos

-¿A no? -La mirada que había puesto pareció asustarlos- cuento hasta 3

-Ese truco no..

-Uno... -Retrocedieron- Dos...

-¡Vámonos!

Sonrío burlón al ver los tres mocosos alejarse a pasos apresurados. Nunca fallaba

Ignorando las huidas de los niños, miro a la niña que lo miraba asustada mientras las lágrimas aun corrían por sus mejillas. Arrodillo una pierna para poder quedar a su altura pero la niña se alejo mas asustada

-Hey no te haré nada -Alzo ambas manos- solo quiero saber si estas bien -La niña asistió lentamente. Toru no pudo evitar mirar los ojos jades de la pequeña, a pensar que sus ojos se encontraban hinchados por llorar, aun así eran como dos pequeñas joyas.

-Tu cabello me recuerda al arbol del cerezo, son flores hermosas, tu cabello también es bonito. -Comento para intentar animar a la niña

-¡Oye tu! -Frunció el ceño al notar como una niña rubia se acercaba a pasos apresurados- ¡aléjate de ella! -Y como si su cuerpo fuera un escudo, la niña rubia se posesiono adelante de la pelirosa

-Ino-chan... -Escucho decir la pelirosa. Toru las miro para después levantarse

-Solo la estaba ayudando niña. pero bueno, por lo que veo se conocen, así que me largo -Comenzó a marcharse, pero se detuvo para mirar sobre su hombros donde aun la niña rubia protegía a la pelirosa quien se había levantado mirándolo curiosa

-Espero que puedas defenderte por ti misma. cerezo

Dicho esto se fue, pero los ojos jades de la niña se quedaron gravados en su memoria.