Comienza un nuevo día para Claudia, eran las 09:00 de la mañana cuando el despertador de su teléfono comenzó a sonar, cuando se levantó y vio a su hermana pequeña delante de la puerta de su habitación.
-¿Qué haces aquí pequeña?- le dijo aún sabiendo que no le iba a responder. La coge en brazos y le da un beso, ésta le devuelve una risa y la baja por las escaleras haciéndole gestos con la cara, llegan a la cocina y Claudia deja a su hermana en el suelo, ella sale corriendo en busca de su madre que estaba en la otra punta de la cocina.
-Buenos días, mamá.- Saluda con un tono serio pero agradable.
-Buenos días, ¿Donde vas tan temprano?- Responde un tanto extrañada
-Ya veo el caso que me haces, voy a jugar a tenis. Te lo dije anoche.-Tienes razón.- Asiente con la cabeza.
Claudia prepara sus cosas y saca la bici de su cochera, cuando sale observa a su compañero acercarse hasta casa, ella, con una sonrisa le recibe.
-Buenos días, que frío hace.- Se frota las manos y se monta en la bici. -¿vamos ya?