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"Un polvo rápido"

Caminaba apurada, esperando no encontrarse con aquel pelirrojo, después de todo le debía un favor y no esperaba pagarselo.

Un simple gracias siempre es suficiente, solo que aquel chico aprovecha cada oportunidad para hacercarsele a querer robarle un beso.

Una sonrisa se formó en su rostro al ver aquel salón vacío, así que entró corriendo y se escondió en uno de los rincones.

"Nadie viene aquí, aparte las ventanas son polarizadas", pensó.

—¿De quién te escondes, preciosa?

Un grito salió de sus labios, pero sintió un gran alivio al ver que se trataba de su novio. Estaba tan distraída que no logro ver qué él la seguía.

—me siento un poco mal, Yoongi-Oppa —dijo, haciendo un leve puchero.— aparte que tendré una prueba física y no quiero —se quejó, mintiendole al pelirrubio.—

Él, por su parte, se fijó que nadie lo viera entrar y después le puso seguro a la puerta, y una sonrisa maliciosa se formó en su rostro.

—siempre he querido hacértelo en la escuela, bebé —dijo, con una voz ronca.— y más si tienes el uniforme puesto

—pero Yoongi-Oppa, tengo una prueba de educación física —le respondió, ruborizada.—

—me dijiste que no entrarías, cariño —él se paró enfrente de ella.—

A JeMi le preocupaba hacerlo y que alguien los viera, pero no podía negar que su novio se veía demasiado atractivo, y de alguna manera sentía que lo necesitaba.

"Igual odio física" pensó para después levantarse e irse a los brazos del mayor.

Él como respuesta le sonrió y después le brinco un dulce beso, el cual se fue intensificando más y más.

—Procura no gritar mucho, pequeña —dijo, tomándola de su trasero para después cargarla.—

Ella enredo sus piernas en la cadera de Yoongi y él torpemente se fue hacia el escritorio para apoyarse ahí. Un juego de lenguas comenzaba, se acariciaban, y peleaban por cual iba a entrar primero en la boca del otro.

—O-Oppa —dijo entre jadeos.— ¿Me dejas dominar? —pregunto con un tono inocente, el mayor solo asintió.—

JeMi se aparto de él, para después indicarle que tomara asiento, ahora en una de las sillas que se encontraban en el aula. Primero la peligris inspeccionó, Yoongi tenía una buena erección, y ella quería hacerle un gran favor, así que sin pensarlo bajo sus pantalones y después el boxer.

Al ver su miembro relambio sus labios, y sonrió. Comenzó chupando la punta, mientras que con sus manos masturbaba el tronco del mayor, solo ella sabía cómo hacerlo sentir tan bien.

Yoongi jadeaba y gruñía, echando su cabeza para atrás, disfrutando del placer que le estaba brindando la menor.

Ella dejó de masturbarlo, para después meterse todo el pene a la boca, claro que las primeras veces le costaba trabajo, pero ahora ya estaba muy acostumbrada a hacer este tipo de cosas. Él la tomo de los cabellos, una de las cosas que le encantaba era embestir su pequeña boca, pero está vez no podía hacerlo debido a la posición en la que se encontraba.

Mi chica -myg bts Donde viven las historias. Descúbrelo ahora