Prohibido Hablar (Secky)

•26•

Taker llegó a la dirección que Paul le indicó y se dispuso a esperarlo. Era un lugar discreto, algo sombrío y lo más importante, estaba lejos de la WWE y de cualquier lugar donde Paul pudiera frecuentar normalmente.

Pensó en pedir un Whisky, pero no iba a dejar que ningún mortal tocara su amada motocicleta Harley Davidson bajo ningún concepto y reprimió ese deseo. Paul ni bien llegó, divisó a Taker e inmediatamente fue a su encuentro.

-No pensé que vinieras tan pronto- murmura serio.

-Necesito saber lo que tienes que decirme, Mark- murmura Levesque con el mismo semblante.

-Necesito que prometas discreción y tacto ante lo que voy a decirte. Tal vez no va a gustarte y quieras actuar por instinto, pero no te lo recomiendo. No hasta tener más pruebas- murmura Taker.

-Me estas asustando. ¿Pasó algo con Stephanie?-

-La encontré Paul pero no precisamente en las mejores condiciones- se sirvió un poco de agua en el vaso y bebió.

-¿Como esta mi esposa Taker?- murmura algo enojado por la frase que aún retumbaba en su cabeza no precisamente en las mejores condiciones. ..

-Stephanie estaba recluida en un manicomio que no tenía ni siquiera registros, permisos y no cumplía con las normas de sanidad. La mantenían drogada y casi no comía, cuando la rescate me murmuró algo antes de desmayarse sobre una chica de cabello naranja y un secreto. La llevé a un hospital a salvo, tuvieron que inducirla al coma para desintoxicarla de tanta porquería que le suministraban que si lo seguían haciendo, ella se hubiese muerto por sobredosis en ese horrible lugar- finalizó.

Paul no podía ni con su alma de la rabia. Su suegro, su propio padre quería matar a una persona tan buena, un ser de luz como lo era su amada Stephanie. Pero ¿Porque? Eso era lo que se preguntaba el padre de Seth ¿Porque su padre quería hacerle un daño tan grande a su propia hija?

Paul con los puños apretados sale del lugar y va a un callejón cercano a descargar toda su rabia en un bote de basura. Lo golpeó y lo pateó tantas veces que se quedó sin molde. Estaba tan furioso y de tanta rabia explotó en llanto. Taker lo siguió y en silencio veía como se derrumbaba ante la noticia. No podía digerirla del todo. Así que aguardó a que se calmara para así llevarlo junto a ella.

...

Becky y Sasha entraron al Performance Center de la WWE. Para la peliazul todo seguía igual que siempre, y le mostraba el área de gimnasios, las duchas, los vestidores, la cafetería y lo más importante: el área donde se desarrollaba la buena lucha libre en todo su esplendor, el área de los cuadriláteros.

-Bienvenidas al Performance Center de WWE. Imagino que tu debes ser Becky- se presenta ante ella un hombre alto, calvo, tatuado, imponente y con un polo negro donde predominaba el logo de la WWE.

-Rebecca Flair, para servirle. Pero puede llamarme Becky y la que está a mi lado es mi guardaespaldas...- El tatuado la interrumpe.

-Sasha Banks, es un placer volver a verte. Que pena que decidiste no seguir con tu carrera- menciona.

-Es una larga y complicada historia. Tengo un nuevo trabajo y pienso enfocarme sólo en eso- se aleja lentamente de el.

-Oh, perdón por no presentarme Rebecca, mi nombre es Randall Orton pero puedes llamarme Randy, seré tu instructor en defensa personal junto a mi compañero que no pudo venir aún por un imprevisto. Ric me pidió que te guiara en todo ya que desconoces por completo lo que es la lucha libre-la pelinaranja asintió- no te preocupes, estoy para ayudarte, al principio costará pero quien sabe después podría llegar a gustarte y ser una superestrella de la talla de Ric o de Charlotte- sonrió