25 Dos pueden jugar

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Hola! Hoy traigo un capítulo muy emocionante. Espero que os guste.❤️

Si queréis que os dedique un capítulo no dudéis en hacérmelo saber por los comentarios.

Alex vio desde lejos a Jason rodeando con un brazo posesivamente a Roxy, le murmuró algo en el oído haciendo que la muchacha se sonrojara y se dirigieron a la zona VIP. Detrás iban su grupo de amigos y entre ellos estaba Gina, suspiró con fuerza frotando la frente, lo último que le apetecía era lidiar con aquella chica histérica.

Llevaba sin verlas desde el día que se morreó con otra chica y no sabía qué le esperaba. Seguramente Roxy seguía enfadada con él por haber roto el corazón de su amiga, sacudió la cabeza intentando apartar aquellos pensamientos y se dirigió hacia la zona del ring para asegurar de que todo estaba preparado para la pelea de Jason.

—¿Dónde está Ryan? —Preguntó Alex a un segurata al ver que no estaba supervisando, normalmente él se hacía cargo de que todo estuviera en orden, sin embargo, llevaba desaparecido un par de horas.

Ya eran pasadas las tres y Jason estaba saliendo del ring, con una sonrisa victoriosa y un pómulo rojizo se dirigió hacia el vestuario dejando atrás el clamor de la gente entusiasmada.

Rápidamente Roxy le siguió y en el camino se topó con Alex. No habló con él desde su último encuentro nada agradable, la muchacha le miró con una ceja alzada y un gesto de desaprobación, dando a entender que no estaba muy contenta con él.

—¿Sigues enfadada conmigo? —Preguntó Alex mirándola con ojitos de perrito mojado. Roxy rodó los ojos sin hacerle caso.

—Estoy decepcionada contigo —Murmuró Roxy cruzando los brazos. —Entiendo que Gina no te guste pero podrías haber hecho las cosas de otra forma.

Alex bajó la mirada jugueteando con su piercing.

—Lo sé —Dijo después de un largo silencio. —Cuando me emborracho soy muy gilipollas.

—Habla con ella y al menos discúlpate —Dijo Roxy —Ha estado toda la semana decaída y apenas me contestaba a los mensajes, ha reunido mucho coraje para venir hasta aquí sabiendo que iba a toparse contigo.

El resto de la noche estuvieron en la zona VIP bailando y bebiendo, Roxy divisó a lo lejos a Alex y a Gina hablando en un rincón apartado y sonrió inconscientemente.

—¿Dónde estuviste Dylan? Llevas desaparecido toda la noche. —Le preguntó Jack a Dylan con una sonrisa malévola justo cuando el muchacho entraba con una sonrisa atontada en su rostro.

Dylan se sonrojó ligeramente y le ignoró.

Ya era viernes, la semana pasó rápido y las cosas iban perfectamente que Roxy sentía que estaba flotando en una nube. Jason se estaba portando tan bien que parecía una persona diferente a la que conoció hacía poco más de un mes. Incluso Bryan que se topó con ella innumerables veces durante la semana no le enfureció en lo más mínimo, hacía uno que otro berrinche pero eso era todo.

—Hola —La voz de un chico interrumpió los pensamientos de Roxy que tenía la cabeza descansando sobre sus manos, estaba esperando a Jason en un banco, había olvidado las llaves del todoterreno en la cafetería donde estuvieron hacía un rato. La muchacha alzó la cabeza y miró al desconocido con desconcierto.

—¿Necesitas algo? —Preguntó Roxy con una sonrisa amable.

—Te he visto sola y me preguntaba si podría invitarte a una taza de café—Dijo con una sonrisa simpática. Roxy le miró sorprendida, pensaba que le iba a preguntar acerca de alguna dirección. Automáticamente giró la cabeza hacia los lados buscando a Jason.

MALDAD #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora