Capítulo 17

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GABRIELA

Alex estaba en el suelo y no dude ni un segundo en ir a junto a él para ver cómo estaba. Marcos estaba agarrando de su hermano para evitar que este se abalanzara sobre nosotros dos, parecía que nos quería matar o algo.

En cuanto estuve al lado de Alex, me puse de rodillas en el suelo y mis manos a cada lado de su cara para ver cómo estaba. Le estaba sangrando considerablemente la nariz y tenía cara de dolor, esto me preocupaba demasiado, esto no tenía que estar pasando.

"Mi vida ¿estás bien? ¿Te duele demasiado la nariz?" pregunté preocupada "¿Tú estás bien? ¿Te hizo daño?" dijo y bufé, porque ahora lo último que tenía que hacer, era preocuparse por mí "Estoy bien, pero a ti te sangra demasiado la nariz."

"Estoy bien, no te preocupes tú ten cuidado con Carlos, me pondré mejor." aseguró "No me pienso separar de ti." afirmé "Y no te digo que lo hagas, solo que tengas cuidado, se le nota las ganas que tiene de darme esa paliza que no me dio hace años."

No entendí a qué se refería, pero en este momento era igual. Me levanté y me enfrenté a Carlos. A mí me daba igual que me diese esa cachetada porque de lo enfadada que estaba ni me dolía demasiado. Me acerqué a él y le di un puñetazo en la mejilla, es lo menos que se merecía por todo lo que le había hecho ahora mismo a Alex.

"Ahora lo vas a defender ¿no?" preguntó irónicamente "Te vas a largar de aquí y nos vas a dejar en paz a mí y a Alex. No te vas a acercar a nosotros por nada del mundo y como me entere por ahí que piensas darle una paliza a mi novio, te juro que iré a tu casa y te la daré yo misma."

"Claro que me pienso ir, no pienso ver esta estupidez que te estás montando con este tipo. Espero que lo disfrutes mientras te dure." Con eso se largó hacia su coche y se fue. Marcos quedó allí plantado sin saber qué hacer, sé que quería ir a junto su hermano y ver qué era lo que le pasaba, porque se podía notar que no lo estaba, y me daba pena que no lo estuviese, pero se metió con alguien que no debía y no lo iba a permitir por nada del mundo.

Me volví a acercar a Alex y le di un beso en la mejilla y me preocupé más porque no paraba de sangrar, y eso no tenía que ser muy bueno. "Escúchame, vamos a ir a dentro de la casa para ver qué encuentro para que te deje de sangrar la nariz, no puedes seguir así." dije y Alex negó "No te preocupes, estoy bien."

"No lo estás y no me pienso ir hasta que me quede segura de que nada te va a pasar." insistí y una pequeña sonrisa apareció en su rostro "Está bien, como quieras." contestó. Con eso lo ayudé a levantarse del suelo a lo que no tardó nada en venir Marcos. No es que hiciese falta que lo hiciera, se notaba que no tenía la cabeza donde lo debería tener.

"Marcos debes ir a buscar a Carlos, algo le pasa, él no es así." dije sin mirar en su dirección "Lo mismo pienso yo, no es normal que te hablara así." aseguró "Eso es lo de menos, pero averigua qué es lo que le pasa, tiene algo raro. Llama a tus padres para que te ayuden."

"¿No necesitas mi ayuda?" preguntó y negué "No, no es necesario, puedo con esto, no te preocupes. Ahora mismo tienes que preocuparte por tu hermano." dije y este asintió "Entonces me voy, y Alex, siento mucho lo que te ha hecho mi hermano, no debió de hacerte eso."

"No es nada, Gabriela tiene razón, está raro. Ve con él y averigua lo que le pasa." Asintió y salió por la puerta cerrándola en cuanto la atravesó. Yo ayude a Alex a llegar a la cocina, allí sería mucho más fácil de limpiar toda la sangre que cayese al suelo o en cualquier otro lugar. Me puse a buscar gasas y agua oxigenada para limpiarle la cara de la sangre y ver si tenía algún rasguño más porque el golpe contra el suelo fue bastante fuerte. En cuanto encontré todo me acerqué a la silla en la que estaba sentado, me senté a horcajadas sobre su regazo y él se quedó mirando para mí.

No llegué ni a taponarle la nariz cuando se quejó y podía decir que había notado algo raro en ella, me parecía que la tenía rota y eso no era bueno. "Alex, creo que tenemos que ir al hospital."

"No es necesario, todo está bien." aseguró por milésima vez y rodé los ojos "No, no todo está bien y nos vamos a ir, no vas a tener excusa." aseguré "Gabriela, en serio que todo está bien. Dentro de un rato te tendrás que ir a tu casa para irte a casa de tus abuelos, no creo que quieras llegar tarde a la cena."

"Me da igual Alex, los llamaré y les diré que no puedo ir. Lo único que me importa en este momento es que tú estés bien, y como no lo estás, no me pienso quedar de brazos cruzados. Vas a aguantar de la gasa y yo te llevaré al hospital." dije seriamente "Te voy a manchar todo el coche, no es necesario."

"Me da igual el coche y que me lo manches, nos vamos a ir y nos llevaremos estas gasas para el camino." Se levantó e hice que se apoyara en mí para ir al coche, se podía marear o algo no quería que se comiese otro tortazo contra el suelo, ya había llegado el que se había llevado cuando Carlos lo golpeó.

Tardamos como una hora en llegar al hospital y nos dijeron que tenía la nariz rota, cosa que sospechaba desde que le puse la gasa, pero al menos había dejado de sangrar tanto. Nos dijeron que lo tendrían que operar porque era una rotura importante y tenía que cerrar los vasos sanguíneos para evitar que se desangrara.

Llevaba una hora allí esperando a que me dijesen algo de él y serían sobre las nueve y media de la noche cuando me llama mi madre, a la cual le digo que no podré ir, que tenía unos asuntos que resolver con Marcos lo cual se creyó sin que tuviese que insistir.

Media hora más tarde, vuelve a sonar un teléfono, pero esta vez no es el mío, sino que es el de Alex, y cuando veo que es su abuela la que llama no dudo en contestar, debía de estar preocupada por su nieto.

"Hola mi niño, pensé que no me ibas a contestar." dijo su abuela y suspiré, porque lo último que quería, era darle una noticia así a su abuela "Lo siento señora, no soy Alex, soy Gabriela." respondí luego de unos segundos "¿Gabriela? ¿Dónde está mi nieto?"

"Lo están operando porque le han roto la nariz." dije y pude escuchar como cogió una bocanada de aire "¿Cómo que lo están operando? ¿Cómo está?" preguntó "No lo sé señora, pero pienso que debería venir con su madre, deberían estar aquí con él."

"¿En qué hospital está?" preguntó "En el de los Hermanos Reyes señora." respondí "Muy bien, salgo de inmediato para ahí y gracias, Gabriela por avisar." agradeció a pesar de que lo único que había hecho fue contestar su teléfono "La debía de haber avisado a usted y a su familia antes, si quiere puedo intentar llamar a la madre de Alex para que venga."

"No, no es necesario, la aviso yo sin ningún problema." aseguró y asentí "Como quiera señora, la espero aquí." dije "Vale, nos vemos ahora Gabriela." respondí "Hasta ahora señora." Colgó y yo me senté en una silla que había allí cerca esperando a que salieran a decirme algo, si estaba bien o que es lo que pasaba, pero esto no se iba a quedar así. No pensaba verle la cara a Carlos en lo que me quedaba de vida, no iba a permitir que esto volviese a suceder por nada del mundo.

El Amor de mi Vida [Modificando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora