ᏟᎻᎪΝΝᏆᎬ •𝘾𝙝𝙖𝙣𝙗𝙖𝙚𝙠•

44.

Maratón 8/10

-¡¿Hyung te dijo eso?!-exclamó el peli-amarillo.

-S-si...

-No lo veía así, la verdad, sigue contando-dijo bastante interesado, tomando un sorbo de su refresco.

-Bueno, luego de eso se quedó a dormir y, un día...

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"Te espero hoy a las 11:30, ¡no llegues tarde, bebé! "

Ese fue el mensaje que recibió el castaño, junto a una dirección.

Sonrió ante tal mensaje, ¿acaso le tendría alguna sorpresa? Mordió su labio inferior, intentando no chillar.

Ya hace unas semanas que se habían vuelto más que unidos, todos los días el mayor le acompañaba hasta su casa, esperaba que entrará para luego irse, le tomaba de la mano, le robaba algún besito, ¡hasta le buscaba para ir a comer algo! Cuando antes el castaño tenía que rogarle, realmente se habían vuelto muy unidos, hasta el punto en que se hablaban todo el día, por mensaje o se juntaban en casa de Baekhyun.

Realmente esperaba que el mayor le pidiera eso, ¿o acaso era demasiado apresurado? Ugh, ¿por qué era todo tan complicado? 

Sin darles muchas vueltas, decidió arreglarse.

Okey, estaba muriendo de nervios. Mordía su labio constantemente, se tomó toda una caja de leche de fresa, jugaba con la manga de su suéter.

Había decidido llevar una playera blanca y encima, ya que hacía un poco de frío, un suéter antes mencionado color durazno, el cuál le quedaba un poco grande, un jean rasgado en la parte de la rodilla y ponerse un poco de maquillaje.

Miró la hora en su celular, era ya la hora. Se encontró frente a una casa, una mansión se podría decir ya que era bastante grande, la cual estaba totalmente a oscuras. Revisó reiteradas veces la dirección para comprobar que era la correcta, para luego inhalar y tocar el timbre. 

Abrió sus ojos con sorpresa al encontrarse a Suho, con una sonrisa plasmada en el rostro.

—¿Hyung?–preguntó curioso.

—Cierra los ojos–le pidió rápidamente, tomándole del brazo para que entrara y cerrar la puerta tras de sí.

Arqueo una ceja y hizo un pequeño puchero.

—¿Por qué? ¿Dond-...?

—Por favor, Baekhyun, cierra los ojos, confía en mí–rogó.

Suspiró y finalmente cerró sus ojos, aunque un tanto curioso ante lo que sucedía.

Unos brazos le tomaron y comenzaron a guiar.

—No vale que abras los ojos, ¿okey?

Asintió con la cabeza, aunque se moría de ganas de abrirlos.

—Cuidado–habló Suho, tomándole de la muñeca y ayudándole a bajar unos escalones.

—Ahora, espera hasta que te diga–soltó una risita.

Pasaron unos segundos, donde Baekhyun moría de la intriga, hasta que nuevamente su amigo habló:

—¡Ahora!

Quedó gratamente sorprendido ante la escena frente a él. Suho, Lay, ,Mark un chico de intercambio realmente agradable, de pie, mientras que Chanyeol sostenía un gran ramo de rosas, con un gran cartel colgado detrás que decía  "¿quieres ser mi novio?" además de unos cuantos globos, pétalos y gran oso de peluche.

—Byun Baekhyun–habló finalmente el peli-negro acercándosele—. Realmente... no sé como comenzar–rascó su nuca—. Desde el primer momento en que te vi, supe que estaba totalmente condenado–sonrió—. No podía evitar mirarte en todos los recesos, aunque no lo creas, quedé totalmente hechizado por ti, en especial por tu hermosa sonrisa. Te buscaba siempre, aunque al principio quería evitarte ya que me sentía muy confundido, no podía evitar sentirme muy feliz. Baekhyun... me encantas, me encanta estar contigo, me encanta abrazarte, me encantan tus tiernos pucheros, me encantan tus hermosas sonrisas, me encanta ese pequeño lunar que tienes debajo del otro, me encanta besarte, me encantas, Baekhyun–acercó su mano y acarició su sonrojada mejilla—. Agradezco a la vida que te hayas chocado conmigo aquel día. Te quiero, Baekhyun, ¿quieres ser novio de este gran idiota?