Bitter Coffee [Kookgi]

3

__ llegas tarde muñeco.

__ lo siento, es que vine a pie__ se disculpó, tomó asiento de cara al hombre., momentos después cuando la camarera pasaba, pidió un macchiato acompañada de frutos secos.

Estos momentos siempre eran los más difíciles para Yoongi. Ese momento en que sus delicadas manos se entrelazaban, pacíficas encima de la mesa, y sus ojos se encontraban con los extraños del otro y en algún momento debía de iniciar una conversación o la estancia sería incómoda.

El primer pasó era hablar para poder conectar más, siempre lo era, sin importar que situación fuera. Pero por alguna extraña razón Yoongi no sabía qué decir, así que simplemente lo observó, quiza eso pondría incómodo al tipo., debería dejar de tener ese hábito de observar tanto, hasta ya alguien le dijo que sus pequeños ojos podrían ver hasta el alma si lo quisieran.

Pero el tipo habló primero, mientras Yoongi esperaba su pedido. Él ya tenía el suyo en sus manos, un café extremadamente negro y humeante, que gustó más peculiar el pedir un café de espesa amargura.

__ asique te gustan grandes.. __ Pero empezó con la cosa menos apropiada que se podría hablar en un coffie caffé tan Pacífico como éste. A Yoongi le importó menos.

__ Entre más grandes mejor, no lo crees?__ hablo este con una sonrisa __ a quién le gustaria tener un pito pequeño en la boca o en el culo__ negó lentamente con la cabeza __ ni pensarlo, sería todo un insulto.

el tipo optó simplemente por asentir y en cambio preguntó algo más ligero como su nombre, sus labios curiosos diciendo un "¿cómo te llamas precioso?, por teléfono no has alcanzado a decirme tu nombre, seguro que es un nombre tierno igual que tu rostro"

__ No te creas __dijo Yoongi con una mueca ladeada, después de que la camarera haya dejado su pedido encima de la mesa, un macchiato cremoso tal como le gusta y unas tostadas de frutos secos apartada en una bandeja pequeña.
__ ni mi nombre es tierno, ni yo soy tierno.

Y Min Yoongi tenía razón, él no era tierno, era sólo la máscara que usaba de preferencia, sólo una máscara.
Con la que había nacido.

Sólo una sonrisa bonita, ¿que había realmente detrás de ello?

Al poco rato el hombre sentado al lado suyo se presentó de una manera extraña mente formal, automática diría el blanquecino. Como quien se presenta con su nombre completo y la convencionalidad obliga al otro a hacer lo mismo. Aunque este no es el caso, aquí había cierto interés que sobrepasaba esa convencionalidad.

Jeon Jungkook, así es como se llamaba, si es que Yoongi recuerda.
La cita en el "coffee dream" había acabado más pronto de lo que Yoongi había esperado, y la parte por la que tanto había esperado había llegado. Así que su corazón latía con más fuerza, ansioso. Y sus mejillas ardían acaloradas.

esta era la parte que más amaba y a la vez más odiaba.

sacaba su parte más débil entre sus recuerdos. Le hacía sentir lleno y a la vez vacio.

Pero lo más importante de todo y al final de todo. Siempre le recordaba a él, a su padre. Y retrocedía en el tiempo, cuando todavía era un niño, uno inocente.