CAPÍTULO CUATRO

996 126 33
                                    

PISTA CUATRO: NUESTRA PRIMERA NAVIDAD JUNTOS Ft. EL INCREÍBLE, EL ÚNICO, EL INIGUALABLE, KIM MINSEOK... Y LA PEQUEÑA IRENE.

— ¿Podrías dejar de dar vueltas por amor al cielo? ¡Estás causándome mareaos! — su pequeño manager, de suaves cabellos castaños, piel pálida y facciones delicadamente bonitas estaba enloqueciendo.

Literalmente estaba haciendo que LuHan se pusiera de nervios.

— ¿Podrías ser un poquito más empático? ¡Estoy teniendo una crisis! — rodó los ojos por décima vez soltando un suspiro de cansancio. El modelo se puso de pie, caminó hasta MinSeok para tomarlo de los hombros y obligarlo a sentarse.

— A ver. Tomemos un respiro y vamos a calmarnos ¿bien? — los ojitos de MinSeok lo vieron llenos de angustia. Respirando ruidosamente como si hubiera corrido un maratón de cien kilómetros. — Todo saldrá bien. La mamá de JongDae no va a comerte ¡Te amará! — declaró lleno de convicción.

— ¡¿Tú como lo sabes?! —

LuHan quiso golpearlo en la cara.

MinSeok llevaba toda la semana perdiendo la cabeza porque sería la primera navidad que pasaría junto a la familia de JongDae después de dos años de relación. Sabía que era una gran cosa, él lo había vivido en carne propia. No obstante, no se encontraba del humor más adecuado para soportar a un tipo aún más histérico y neurótico que el mismo.

— Te irá genial, ya verás. Creme cuando te digo que no es tan malo como piensas. —

— ¡¿Con qué derecho lo dices?! Tu suegra te adora. — reclamó. LuHan conjuro una mueca ofuscada sintiéndose totalmente ofendido.

— ¡Por supuesto que lo hace! Pero ¿recuerdas a Irene? No tienes derecho a reclamarme nada. — respondió ceñudo.

Un escalofrío recorrió su espina dorsal de solo recordar aquellas fatídicas fechas de diciembre.

💫💫💫

Tres años antes

— Vamos, amor. Te he dicho mil veces que mi madre es tan peligrosa como una esponja. Nada va a pasarte. — LuHan hizo un puchero.

Llevaban diez minutos en el aeropuerto con un LuHan muerto de los nervios porque sería la primera vez que conocería a la familia de SeHun. Muy interiormente sabía que estaba siendo demasiado infantil en su comportamiento, pero SeHun era su primera relación seria y conocer a sus familias era un paso más que lo ponía emocionado y muy asustado al mismo tiempo.

— Esto es muy pronto, SeHun. Digo, podemos esperar un poquito más...— su voz se hizo unos tonos más aguda. Sonrió brillantemente lleno de tierna coquetería y con sus deditos dibujo circulitos sobre el firme pecho de SeHun, en un vago intento de convencerlo de regresar a Seúl.

— ¿Qué dices? Yo conocía a tu abuela al segundo día de ser novios. — reclamó sin molestia.

— Mi abuela es un dulce de mantequilla ¡No había peligro real! ¡Te adora más que a mí! — puchereó. SeHun lo jalo de la muñeca para esconderlo entre sus brazos, con la esperanza de tranquilizar el nerviosismo que asaltaba a su pequeño chico sin ninguna razón.

— Voy a omitir el hecho de que estás insinuando que mi madre es un ogro cruel y despiadado solo porque me agradas demasiado. — bromeó. LuHan solo gimió de frustración contra su camisa logrando que SeHun apretara su abrazo y soltara una fresca carcajada. — Además, el lado bueno es que estará BaekHyun, KyungSoo, Tao y MinSeok para darte apoyo si mi mamá es demasiado para ti. —

LuHan se lo pensó por un minuto y como un bálsamo para sus nervios destrozados su corazón comenzó a latir más despacio. SeHun le había contado que en épocas navideñas su madre organizaba una gran reunión con sus amigos. Había ocasiones donde iban todos, otras donde nadie podía asistir, pero era algo común en un trabajo como el que ellos y sus amigos tenían.

Pistas para LuHan  [HunHan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora