prefacio.

21 0 0
                                    


-¿Ves la luna?

-Sí, es hermosa.

-¿Sabes por qué está llena?

-Dímelo tú…

-Es como un dedal, te protege de pinchazos.

-¿Y de qué nos protege la luna?

-Ella actúa como refugio carnal, es la cárcel del amor, es cómplice de miles d

e aventuras, une corazones, resuelve lo imposible…

-¿Aventuras… cómo ésta?

-Prométeme algo… Cada vez que la luna esté llena, sabrás que en algún lugar de este pequeño planeta, habrá alguien pensándote, amándote, queriendo hacerte feliz, deseándote a su lado, sin importar lo que ocurra a su alrededor. ¿Lo prometes?

Sí, ese soy yo, Sam

Smith, en mi papel de poeta, dejando a un lado mi actitud de frio y calculador, actuando sensiblemente, algo que jamás habría imaginado. Ese joven grotesco, sutilmente vulgar, chabacán, ¿entregaría su corazón? Pero bueno, no todo siempre pinta color de rosa, o más bien, no todo siempre está libre de obstáculos. Y centrándonos en lo más importante, ¿quién sería ella? Un alma en pena que ha poseído un cuerpo de pasión… Alta, blanca, de contextura media que sólo llegaría por una casualidad, que la conocería sin prestar mayor importancia

que la conocería 730 días antes sin prestar mayor importancia. Pues, todo comenzó como cualquier casualidad…

To the moon and back.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora