CAPÍTULO IXX

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Misión rescate

   La miré extrañado, no pensé que dijera algo así, además era peligroso, no podía permitirme ponerla en peligro, así que era un rotundo no, la tome de la mano y le agradecí por su intención pero no me perdonaría si algo le pasará, esta decidido, iré solo, es por tu bien, me dí la vuelta y al dar unos cuantos pasos escuche un sonido, aclaró su garganta y me miró con una risa burlona, y que piensas hacer sin la llaves de la avioneta héroe, no pude evitar sentirme como un tonto y reirme, se las pedí pero no quería darmelas. -"¿Acaso tu sabes manejar avionetas"?... No puedo negarlo tenía un buen punto, yo era más de viajar, no de pilotar,  soy un genio en la electrónica y computación pero pues no debe ser tan complicado, “es con una palanca no“?  Ella no pudo evitar reirse y me miró como a un niño, -" Ves, me necesitas, deja que te acompañe y yo seré la piloto".

   Me puso entre la espada y la pared. No tenía muchas opciones así que acepté a que me acompañase, con la condición de que no se alejara de mi vista, nos preparamos con los trajes y todo para irnos y Monty nos dió unos radios algo antiguos pero era para mantenernos comunicados a distancia, junto con un rastreador para cada uno, no estaba en mis planes este pequeño contra tiempo así que debíamos darnos prisa.

   Una vez en las calles la situación de nuevo era intensa e impredecible, aunque no habían rayos solares el calor era terrible y el ambiente era como estar en el infierno, corrimos lo más rápido que podíamos tomando pequeñas pausas para ver el mapa he idratarnos, la topografía del lugar era irreconocible, edificios caídos y calles destruidas, lo que hacia que moverse fuera cada vez más difícil, luego de caminar un buen rato, al parecer estábamos cerca, pero antes debíamos enfrentar un obstáculo...

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