00 e p í l o g o

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Desperté.

Y ahí estaban Felix y el Dr. Kim. También una enfermera, y todos estaban felices. Todo era real. No se lo contaré a nadie.

Descubrí quién era el chico que hablaba en mis sueños, el que me llevó a la cabaña apartada y me pidió que despertara. Y lo extraño demasiado, extraño a Minho.

El Dr. Kim me habló sobre Yang Jeongin. Dijo que tenía una enfermedad mental que se agravaba y que era imposible que no terminara como terminó. Yo no tengo nada contra él, deseo que se recupere porque es muy joven. Además, creo que lo siente, porque mientras estaba en coma, se disculpó.

Felix me llevó al jardín del hospital el día que me dieron de alta. Juntamos flores con el permiso del jardinero, y me acompañó a la cabaña apartada para enfermo terminales. Minho dio su último respiro ahí. Felix me contó, que Minho estaba vivo cuando ambos llegamos al hospital, pero que murió después de unos minutos.

Dejé las flores en la entrada de la cabaña. Sentí en mi pecho de nuevo esa presión tan conocida. Le agradecí a Minho que me haya ayudado a despertar.

Y pude recordar con claridad todo; íbamos de viaje, él quería visitar su cuidad natal, estaba muy contento, serían nuestras primeras vacaciones juntos en su hogar, le ilusionaba la idea de que conocería también dónde creció. Él iba conduciendo, era de noche y hacía mucho frío. Recuerdo que comentó algo de que al llegar quería tomar un café, nos miramos durante menos de un segundo y me sonrió. Cuando ambos volteamos, lo último que vimos fueron un par de luces que corrían hacia nosotros a toda velocidad. Y después silencio. Recuerdo que desperté en el hospital, y aún recordaba todo; yo solo quería ver a Minho, necesitaba ver que estaba bien. Un doctor llegó, y me dijo que murió. Después nada. Lo que último que vi de él, fue una sonrisa.

Recordé en especial que lo amaba mucho, más que a nada en ese momento de mi vida, aún lo hago, y también sus últimas palabras en mi sueño:

-Jisung despierta. Te amo y quiero verte vivir. Todo estará bien te lo prometo... Necesitas despertar, aún estás vivo y debes aprovecharlo. Si me recuerdas, llora; si me olvidas, también. Tienes derecho a hacerlo, pero no olvides que la vida es para los vivos, y yo ya no lo estoy. Déjame descansar, descansaré viéndote vivir. Estaré contigo siempre que me busques aunque tu pienses que no, recuerda que te amaré siempre.

𝘿𝙚𝙨𝙥𝙚𝙧𝙩𝙖𝙧 minsungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora