Estúpido destino..

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Abro la puerta del galpón, es bastante grande, a los Costados tiene dos barras de tragos muy largas, en el fondo un escenario para las bandas que vienen y la pista de baile, también hay sillones blancos, que en la oscuridad resaltan más y por último, la zona VIP, que esta subiendo las escaleras.
Como somos los invitados a tocar nos dan pases VIP para no mezclarnos con nuestros fans y que no nos molesten, si así de famosos somos en la ciudad. Aunque los fans no molestan mucho, pero es estresante dar autógrafos y fotos a todos los que pasan cada diez minutos.

Todavía el lugar esta vacío, solo estamos los de la banda y las personas que trabajan aquí. La gente está esperando afuera a que abra el galpón.

Mack está acomodando su micrófono a su altura, lo toca con su dedo tres veces y vocaliza. Vocaliza de una forma muy extraña. A su lado está Roey tocando su bajo, él lo hace llamar Dieguito bajito. Y atrás de ellos esta Suler en la batería con sus baquetas adentro de su boca imitando a una foca. ¿Por qué son tan raros?, no lo sé.

—Aaaaallelluyaaaaaaa, Hooooolaaa caraaa de booolaaaaa, mi mamá me mima mi mamá me mima, caca pedo pis caca pedo pis, Lararar...¡ALLYSON MALDITA SEA POR FIN LLEGAS!—grita Mack por el micrófono Interrumpiendo su rara vocalización.
Creo que con su grito reventó uno de mis tímpanos.

—Estaba practicando en el metro, con más tranquilidad.—comento mirandolos a los tres.

—Pero si con nosotros puedes prácticas bien, miranos—grita Suler desde la bateria.

Hago una mueca al ver que ahora se está metiendo una de sus baquetas en la nariz.

—¿Puedes dejar de meterte las baquetas en todos los orificios de tu rostro Suler?—pregunto horrorizada.

—Deben estar traumadas—opina Roey, Yo asiento.

Suler esta apunto de responder pero es interrumpido por Garret, el dueño de Dangerous y nuestro representante.

—Okey raros basta de tonterias, en diez minutos va a entrar toda esa gente—apunta hacía la puerta—, y quiero que estén en sus lugares, listos y preparados. ¿Bien?

—Bien—respondemos los cuatro al mismo tiempo.

Subo al escenario, conectó un cable del parlante al jack de mi guitarra y rozo algunas cuerdas. Me quito el bendito gorro y la chaqueta negra que tengo puesta. Los otros se preparan al igual que yo.

—¿Con cuál empezamos?—Pregunto

—Yo digo que con "sadic melody".—dice Roey.

—Estoy de acuerdo—opino

—Bien—dice Suler encogiendose.

—Okey rockeros ¡A rockear como se debe!—dice Mack gritando.

Ella es la típica chica que esta todo el tiempo alegre, activa y enérgica, Bueno, pero eso nos sirve a todos, ya que ella es la voz principal y la que se pasa animando al público. Al igual que Suler.
Yo por mi lado me dedicó a tocar la guitarra y cantar algún que otro estribillo, no me ánimo a tanto como Mack. Roey cuando toca, cambia drásticamente, creo que casi nunca sonrie, el siempre está concentrado tocando su bajo y una que otras veces mira a las chicas del público y les guiña el ojo, están locas por él y obviamente por Suler. Sin embargo, tenemos público de todo tipo, no sólo chicas.

Como dijo Garret, en diez minutos abren el galpón, muchas personas empiezan a entrar, pidiéndose tragos, sentándose en los sillones, etc. Cuando ya está bastante lleno el lugar, Mack empieza a hablar al público.

—Buenas tardes señoras, señores, chicos y chicas o lo que sean.¡¡¡¡ESTA NOCHE VAMOS A VOLVERNOS LOCOS!!!!.

El público aplaude y grita.

"No tengo tiempo para amar"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora