—No puedo creer que te casas en media hora.—Dijo Christina a mi espalda,terminando de cerrar mi vestido de bodas.
Desde que era una niña soñe una boda como la de mis padres,sencilla,de Abnegación, con familiares,creía que mi esposo sería Robert mi vecino. Pero por el otro lado. Estoy feliz. Christina y Caleb han arreglado la boda,ayer fuí a ver el salón. Era hermoso. Evelyn y yo hace un mes fuimos a comprar mi vestido,no puedo creer que lo costeara ,pero almenos yo escogí mi propio vestido. Es blanco. Sin tirantes. Escote de corazón. En mi cintura tiene destellos dorados,que inician de allí hasta mis pies. Termina liso,al natural. Creo que es perfecto para mi. No soy de esas chicas que le gusta la ropa despampanante ,como Christina. Amo este vestido. Vuela con el viento. Conmigo. Como si tuvieran alas que me llevarán a mi destino.
—Eso dijiste está mañana.—Cuando siento que termina me volteo y la mira.— No puedo creer que te casas hoy.—imitando su voz.
—¿Yo como estoy,mami? — me dice Diamond lista para la boda. Lleva un vestido verde agua,que hace sus ojos más azules.
— Estas Preciosa,mi angelito—Digo mientras veo encima de ella un destello de cabello negro en la ventana,parece ... Un niño.—Disculpen,creo que necesito un poco de aire fresco ,vuelvo enseguida—Digo y salgo por la puerta trasera,recogiendo mis faldas para ensuciar mi vestido,y voy a esa ventana y sí veo un niño ,creo que tiene 8 o 9 años,con un sweter azul,y pantalones cafés ,tiene lentes y en ellos veo sus ojos azules,no un azul común es como un..cielo azul luego de una tormenta,mirando a... Diamond. Espera ¿qué? Mi Diamond. Mi Diamond tiene un admirador. Tiene algo en sus manos. Un libro. Puedo ver un brillo en sus hermosos ojos azules,es como el brillo que tiene cada persona al encontrar a dicha persona que está destinada a encontrar.
—Disculpa.. ¿Buscas a alguien?—después de que digo eso,el se voltea a mirarme,esconde el libro a su espalda y levanta el mentón.
—Yo.. Eh estaba..
Me salé una sonrisa simpatica,en verdad es un tierno chico.
—Buscas a Diamond ¿verdad? Puedes decirme ,yo soy su madre.
—Si.. Voy a la biblioteca,la conosco porque ella va constantemente,ella es lin..quiero decir,ella estaba como loca,he digo,estaba buscando Historia de dos ciudades de Charles Dickens ,yo lo encontre para ella..—Saca el libro de su espalda,y lo estiendo,parece una edición especial,pero en este momento me fijo en algo todavía más especial.
—Asi que,tragiste ese libro desde la biblioteca ¿cómo te llamas?
—Max.. Max Lightwood
—Max,es un lindo nombre —me pongo a su altura.— Veo en tus ojos Max,algo especial hacia mi hija,lo ví,desde adentro,te consederé algo.. Puedes entregarle este libro a ella,por ti mismo,y además,tengo algo que preguntarte.
Hay cierto brillo en sus ojos con las cosas que acabo de decir ,como sabe que estoy en lo cierto.
—Que sería,señorita Prior?
—Si te gusta mi hija,no tengas miedo,no creo que vaya a la biblioteca solo por los libros y bueno ¿te gustaria ir a una boda,acompañandola?* * *
DIAMOND
Aliso mi vestido dentro de la iglesia,es una de las reglas que la novia llevue tarde asi que estoy terminan los asientos de los invitados,Tía Christina se desveló en hacer esto con abuela y creo que es maravilloso..
—eh.. Diamond yo..
Me volteo,y veo a mis espaldas,un chico de pelo negro y ojos azules,siempre los similaré como un cielo después de una lluvia,después de un arcoiris,alejando todo dolor de quien lo padesca,es como si mi nerviosismo parara derepente. Max. Es el chico de la biblioteca. Lleva algo en la espalda. No se que mueve mis pies,pero ya estoy enfrente de él.
—Max..Has venido a la boda..
—Te traje esto..—me pasa un libro,no cualquier libro. Historia de dos ciudades. Es el libro que quería tener de la biblioteca de la ciudad.
—No puede ser,creí que la señora Ingrid,dijo que no lo tenían.—Digo mientras sostengo el libro y lo abrazo a mi cuerpo.
—No lo tienen..yo..lo encontre en la biblioteca de mi hogar.
—Pero no lo necesitan,debe ser muy valioso,bueno es Charles Dickens,osea el maestro.—se me sale una sonrisa juguetona mientras lo digo y sonrio.
—No,a mis padres les importan otra clase de libros,bueno no aprecian al Maestro Dickens.—Dice eso regalandome una sonrisa,se siente... Calido.
—Hay un asiento vacio a mi lado en la ceremonia de la boda..tu querías,sentarte a mi lado..,es decir ya sabes,leerlo juntos? —me sonrojo al decir eso y agacho mi cabeza para que no vea mi cara de tomate.
—SÍ,es decir,me encantaria..—no le doy tiempo de terminar le tomo la mano y caminamos rapido a nuestros asientos riendo felizmente.