Huérfanas Almas Cautivas [Mi versión]

V

— ¡Serkan!... Perdón no pensé... ¡AGH! ¡Defne!.

Serkan nos mira serio por un momento pensé que estaba enojado pero no... tomo la cubeta y la empezó a llenar ya que nos dijo que nos ayudaría pero que no dijéramos nada las dos asentimos y dejamos que Serkan llenara la cubeta con agua.

Una vez que la lleno volteo donde Defne y le lanzo la mitad de la cubeta de agua yo me sorprendí haciéndome para atrás, Defne gritó su nombre y mientras el veía la divertida escena yo empecé a reír.

El giro a verme riéndose, yo me encontraba riéndome demasiado que cerraba los ojos y en ese momento que cerré los ojos el lanzo lo poco que quedaba de la cubeta con agua.

— ¡Serkan!— Pronuncie su nombre, Defne también empezó a reír.

— Ya estamos a mano.

Cuando dijo eso junte mis dos palmas y las llené de agua para tirarle a el también por segunda vez.

— Serkan si nos ven así nos van a regañar.

Después de minutos reaccionamos los tres igual no podíamos irnos ya que se darían cuenta o tal vez no...

Regresamos a la biblioteca con el trapeador, mojamos un poco el piso, salimos de hay y cerramos la puerta con llave como dijo el profesor Toprak dejando la llave en una alfombra que tenían hay bajamos lo más rápido al primer piso para luego salir corriendo de la escuela.

En el camino para solamente íbamos yo y Serkan quien me acompañaba al orfanato.

— ¿Tienes frío?— Se detiene y después yo.

— Un poco espero y no enfermar— Dije nerviosa.

Serkan saca una chamarra que tenía en su mochila y me lo entrega.

— ¡No! No hace falta ya casi llegamos al orfanato y me cambio rápido de ropa.

— Tomalo para que no te pongan mal o algo más grave y luego nos culpen.

Tome la chamarra y me la puse— ¡Gracias!.

— No hay de que— Seguimos caminando— Y una pregunta espero no incomodar.

— Claro dime.

— ¿Como fuiste a parar en el orfanato?.

— Fue decisión propia me fastidie de estar en casa con una mamá que defiende a su esposo y un papá alcohólico y que se droga más golpea a mamá.

— Ya, pero ello saben de esto?.

— Si, mi mamá... mi papá ni idea si sabe o no.

— Ya entiendo y eres amigas de Eylül, Songul y todas ellas ¿Cierto?.

— Si, somos hermanas como ellas dicen— Reí.

[...]

— Y llegue a mi nuevo hogar— Dije parandonos frente a la entrada del orfanato.

— Bueno... ¿Que haces?.

— Darte la chamarra— Estaba apunto de quitarmela cuando el la vuelve a poner.

— Mañana me la das en la escuela, queda mucho camino para que llegues adentro.

— Bueno... gracias nuevamente— Sonreí.

— De nada... me tengo que ir adiós.

Nos despedimos con dos veces en la mejilla, entre al orfanato pero alguien me tomó de la muñeca haciendo que volteara.

— ¿Papá? Que haces aquí.

— ¡Vámonos de aquí! Tu casa es allá no aquí— empezó a jalar a la salida.