°Один°

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Desde la reunión del CNI el horario del comisario y el superintendente coincidían más de lo habitual con el del "Subinspector Dan".

Se había descubierto que se complementaban mejor de lo que se creía. Sus tardes se las pasaban en códigos 1 a códigos 3, de éxito en éxito, Dan era rápido para decir el aviso,  Volkov para responder y Conway para acudir.
Horacio no se sentía tan solo por las tardes, al contrario, se sentía valorado, escuchado y respetado. En una de estas en las que se encontraba, Dan avisa nerviosamente una persecución de dos tipos con máscara en moto, Volkov le responde igual de nervioso:

— Tranquilo Dan, no está solo, actualice 10-20 cada 2 segundos—🦋

Esta frase le hace recordar algo... Un sentimiento... La urgencia, la rápidez;  palabras que intentan tranquilizar pero el temblor de ellas hace entender que el mismo emisor carece de esa tranquilidad que intenta transmitir... Justo como aquel entonces.

Pequeños actos, pequeñas frases como estas se hacen retumbar en la cabeza de Horacio al hacer un 10-8 a comisaría después de una jornada dura de trabajo.

A esto se le suma la llegada del Binomio formado por el Superintendente y Volkov, que llegarían para  adquirir de nuevo materiales y chalecos.
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El Subinspector sube las escaleras de la comisaría  absorto en sus pensamientos, preguntándose, ¿cuándo dejó de verse con el comisario?
Demasiadas cosas habían pasado, le hecharon del cuerpo como Horacio,  volvió como subinspector Dan, al mismo tiempo que entraba a una mafia.

Pero en el proceso "Horacio" fué el que se llevó todos los golpes. Logra recordar la última vez que lo vió como "Horacio" y el sentimiento no es bueno.
Recuerda la decepción en sus ojos, el tono duro de sus palabras y la frustración de su cara. El momento del interrogatorio. En esa situación Horacio y Gustabo montaban un teatro para las cámaras y para Volkov.

Aunque fuese de mentira, la reacción de Volkov no era mentira.

Y esa espina se quedó en el corazón de Horacio.

Después de reflexionar en el salón de comisaría un largo rato, ve a Volkov andando de aquí para allá, y justo en ese instante se propone una cosa.

Tenía claro de que no se arrastraría más, pero necesitaba aclarar las cosas, más por si mismo que por él, esa espinita no desaparecía, y necesitaba liberarse de esa presión. Necesitaba confirmar de que el Comisario era consciente que lo hizo por la investigación, que no le traicionó  "Yo no soy un mentiroso".
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Hey~ Este es el primer capítulo de lo que viene siendo la esperada charla Volkacio que nunca se tuvo. Esta la espinita del submarino, y espero aliviar un poco de ese dolor.  Intentaré que sea soft.
A no seeeeeer... que me venga la vena plotwist. Tsk ustedes saben cómo soy.

🦋 Si son jotos, denle voto🦋

Otra vez a tu lado 🦋Volkacio 🦋 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora