007✔[SIN EDITAR]

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Habíamos llegado a su casa, parecía un condominio muy mal cuidado, algo sucio y peligroso. Estaba aterrada, tanto que mis manos comenzaban a temblar por sí solas y no era por el frío abrumante de la estación. Respiré hondo, tanto que mis pulmones pedían un receso. Chris, él sólo miraba al rededor y ponía caras de preocupación. Su yeso lo hacía ver tan inocente y vulnerable...

-Bien, saldré ahora. Cerraré con llave y no quiero quejas de ninguno. Ya me encargué de ronper tu maldito teléfono, hijita.
Sonrió al final y nos dejó dentro. Así como vino, desapareció en su auto nuevo. Miré a todos lados, era todo tan sucio que no reconocía nada. Comencé a moverme por la casa, no había mucho que mirar pero aún así quería disipar mis nervios.
Lo único que había en la heladera que firmemente me animé a abrir, eran cervezas y algún que otro licor fuerte.

-Iseul, lo lamento. Debí defenderme, y esto no estaría pasando.
El rubio se lamentó y comenzó a rascar su nuca de manera nerviosa. Fui hasta él, y bajé su única mano funcional, acaricié su mejilla y tomé asiento en un supuesto sillón.

-No es tu culpa Chan, sabes que no. Además, no tuve porqué dejarte solo.
Me lamenté, hasta que él me tomó por la cintura en una especie de abrazo. Negó varias veces y me dedicó una media sonrisa. Podía jurar que con la sonrisa de Chan, nada me importaría.

-Y también lamento que tu relación con MinHo se rompiera de tal manera.
Reí por lo bajo, y negué.

-Debí medirme con esas palabras.

-Todos tenemos impulsos que muchas veces son incontrolables, Iseul. El vocabulario es uno de ellos, a veces no se cordinan las palabras.
Asentí varias veces mientras apoyaba mi cabeza en su pecho, el yeso no era de gran ayuda. Quería que sus manos cariciaran mi cabeza o que simplemente trazara una y otra vez las constelaciones en mis manos.

-Cuéntame de las estrellas, Chan.
Pedí sin filtros, no sabía casi nada de ellas y llevaba varios meses viviendo con una.

-Las personas, si mueren ayudando o protegiendo a alguien, suben convirtiéndose estrellas, ¿interesante, no? Bueno, pues es mi caso, fallecí porque estaba cuidando que una persona que ahora mismo, tendría casi treinta años. Se la buscaba mucho, era tan impulsiva como tú. Un día, la acompañé hasta el parque en donde jugábamos a ser piratas de pequeños, ella estaba muy deprimida, ¿cómo no? Su noviecito la había dejado, y resulta ser que entre vuelta y vuelta nos besamos. Fue la noche más mágica de mi vida como humano, era esa sensación de mariposas dentro de ti. - Rió para entonces, suspirar y seguir con su historia- La noche pasaba lento, y como cualquier adolescente, nos gustaba el peligro y ella, pasó por el medio de una calle bastante transitada... Pero estaba cegada, tal vez y había tomado algo, lo que no era nuevo. Mi vista alcanzó a ver aquel coche azul a toda velocidad para atropellar a mi protegida, no pasó, porque yo fui arrollado en su lugar. Estuve en el hospital muchas horas, ella se quedó todo el tiempo conmigo, hasta que sentí esa paz. Y recordé entonces, que le salvé la vida, fallecí allí mismo por una taquicardia muy fuerte producida por las contuciones de mis pulmones y órganos. Desperté en una nube, ¿así se veía el cielo? Pensaba yo. Pero me equivoqué, una luna gruñona comenzó a mandonearme para que escogiera un protegido o protegida.
Y allí vi a una pequeña niña anhelando desde su balcón una estrella que le cambiara la vida, y si era un chico guapo, mejor.

Reí entre lágrimas, sabiendo que hacía referencia a mí.

-Me fui acostumbrando, preparando para ser la mejor estrella sobre el planeta, y poder pertenecer a una constelación.
Yo, la llamaría 'stray'. ¿Sabes por qué? - Negué varias veces, mientras limpiaba mis mejillas con las mangas de aquella sudadera. -Bien sería una constelación perdida, la que quiere que la encuentren y finjan saber su nombre, cuando en realidad sólo la habitaría Bang Chan, un muchacho que nadie sabe dónde está, ni dónde fue.
Es gracioso, porque pediste más estrellas para cada una de tus personas favoritas.

Bright Star | Bang Chan (LIBRO 1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora