Sin Tiempo Que Perder

Capítulo 3- Mi Nueva Familia

Aquí os traigo el tercer capítulo, al final me he quedado hasta tarde para terminarlo porque no podía esperar a que vierais como va a cambiar la historia en tan poco tiempo jaja. Disfrutad del capítulo!!

Una vez entré en aquella cafetería me senté en una de las sillas mientras todo el mundo me seguía con la mirada. Los susurros y cuchicheos llenaron la amplia habitación, pero de pronto cesaron y se hizo el silencio. Eso fue debido a que J se subió en una de las mesas y todo el mundo entendió que tenía algo que decir.

-"Como ya veo los secretos en este sitio son imposibles de guardar"- dijo con esa tono casi monótono que tanto me costaba interpretar. Algunos de los chicos dejaron hasta de respirar por un instante de lo asustados que parecían por aquellas palabras.- "Pero ya sabéis que entre familia no hay secretos. Así que, quitaros esas caras largas que tenéis y no os preocupéis. Estaba bromeando"- aclaró finalmente, por lo que a lo que la mayoría les cambió drásticamente la expresión, que dio paso a carcajadas que llenaron los vacíos pasillos de aquel edificio.

Jacob volvió a hablar, esta vez levantando la mano y haciendo un gesto para llamar la atención de los distintos grupos de jóvenes. La mayoría eran adolescentes, pero pude distinguir pequeños grupos de niños e incluso algún que otro veinteañero. Todos callaron de nuevo, y ahí fue cuando toda la atención se posó de nuevo en mí. 

-"Ya sabéis quien es, pero la voy a introducir igualmente. Ella es Katherine."- dijo señalándome y me indicó que me pusiera en pie, que fue lo que hice. -"Es nuestra novata más reciente, pero no por ello hay que subestimarla, ya que ella es especial, más que todos vosotros. Ella tiene los siete dones: el tiempo, la mente, la fuerza,la energía, la realidad, los elementos y la sanación."- y así fue como me enteré de que no sólo era capaz de controlar el tiempo. Todo tenía sentido, todas aquellas veces que había hecho que algo a lo que no le encontraba explicación. Aquella vez que rompió una pared, cuando hizo que una señora le pidiera perdón a un camarero solo con pensarlo; o hasta cuando una herida se me curó de forma casi inmediata. Pero, ¿cómo no he podido darme cuenta antes?

Después de presentarme de aquella manera delante de todos, me miraban aún más, e incluso pude distinguir respeto y admiración en ellos. Todo esto había sido una gran sorpresa para todos, menos para Jacob, Jake y algunos cuantos más de los veteranos del Hoyo. Ellos y los que ya no se encontraban allí; ya que habían sido trasladados a otra base de mayor categoría, me llevaban observando mucho tiempo. Desde hace más tiempo del que yo podía recordar. Me veían como a un tipo de líder, al contar con lo que ellos llamaban los siete dones. Por ello y porque me resultaba más atractivo que volver al orfanato, decidí quedarme allí. Además, no me preocupaba que nadie me buscase, ya que era huérfana, no me quedaba familia y los del orfanato estarían felices de tener una boca menos que alimentar.

Así pasaron los días, las semanas, hasta que ya me consideraron uno de ellos. Pasé a aprender las normas básicas del Hoyo, empecé a ayudar en las tareas de cocina, limpieza y vigilancia. E incluso hice algunos amigos, como una afroamericana llamada Molly con el don de la fuerza; una chica con una sonrisa enorme, Lily, con el don de la sanación; y mi primer amigo allí, Charles, que tenía el don de la energía.

Un día cualquiera mientras realizaba mis tareas diarias, fui llamada a la cafetería, el lugar donde todo comenzó. Ya allí, me encontré con J, Jake y los demás veteranos, que me explicaron que mi misión siempre había sido liderar la Rebelión, nuestra lucha constante contra los que nos perseguían. Yo ya sabía que hace dos años había salido elegido en las elecciones el Gran Presidente Smith. Sin embargo, lo que no sabía era que a las espaldas de los ciudadanos perseguía a los mutantes contando luego que les ayudaba a "curarse" y a volver a poder vivir en la sociedad. Así, él y su gobierno contaban con el apoyo de la mayoría de los ciudadanos, que no sabían realmente lo que estaba sucediendo. Pero mi nueva familia me apoyaba a mí, el Hoyo confiaba en mí y eso era lo que más me importaba.

Con su apoyo y su incondicional esperanza, que me acompañaban en cada paso que daba, me sentía imparable. Así, me preparé para contar al mundo nuestra historia. La historia de un grupo de jóvenes, una gran y diversa familia, que quería hacer llegar su mensaje a todos los rincones.

-"No somos monstruos y no queremos ser oprimidos más tiempo. Queremos ser tratados como iguales, y tener las mismas oportunidades que todos los demás a los que llamáis "normales". No necesitamos ser "curados" por vuestro gobierno, ya que no nos curan, nos matan lentamente y nos arrinconan como a presas. Mas eso se ha acabado. Estamos cansados de intentar cambiar las cosas a su manera, por ello les pedimos que se unan a nuestra causa en una manifestación pacífica el próximo sábado en el centro de Madrid. Pero tengan en cuenta que si ustedes atacan nosotros responderemos con fuego".- terminé diciendo en mi discurso que se televisó en todos los principales canales del mundo.

Y así  comenzó la Rebelión. Días después este mensaje se emitió y fue un éxito inmediato, habíamos encendido la llama del cambio, y solo era cuestión de tiempo que hiciera explotar la bomba. Pero esto solamente era el principio. 

Esta capítulo ha resuelto bastantes dudas a nuestra protagonista, y confío que ha vosotros también. ¿Qué pasará ahora con el Hoyo? ¿Cómo reaccionará el Gran Presidente Smith? ¿Y el mundo?

Para terminar, quería dedicar este capítulo a los personajes en los que me he basado para crear a Molly, Lilly y Charles. Ya sabéis quien sois jeje, os quiero; y no os preocupéis que en los próximos capítulos se sabrá más de vosotros :)