amor prohibido

Aquiles

Aquiles se encontrá entrenando bajo la sombra de un gran árbol en una colina de donde podía observar las claras aguas de la playa de Ítaca, a lo lejos pudo ver a Ulises acercarse a dónde yo estaba entrenando a su lado se encontraban la mujer más hermosa que hubiera visto 

"Aquiles mi amigo ella es Thalia princesa de Troya" el la presento tal parece que aquella hermosa mujer era la princesa 

"Así que tú eres el gran Aquiles e escuchado muchas historias sobre usted" dijo con una sonrisa en su rostro 

" Sin embargo yo no escucho nada sobre ti" le dijo de forma tajante

"Ella quiere que la entrenes" dijo Ulises tratando de cambiar el tema 

"No, es muy pequeña y frágil se romperia fácilmente y no me are responsable de la muerte de una princesa" Aquiles sabía que le había prometido a Ulises que la entrenaría pero era tan pequeña que dudaba que pudiera levantar la espalda

A Thalia no le gustó nada lo que dijo por lo que tomo una espada de madera y arremetió contra Aquiles dando un grito de guerra, el guerrero más experimentado fácilmente la esquivó para luego golpearla con fuerza unos cuantos golpes fueron suficientes para el someter a la princesa 

"Tienes agallas niña, muy bien te entrenaré pero no esperes que sea suave contigo" dijo el pues apesar de haberle ganado quedó sorprendido por las habilidades de la niña

"No esperaba que lo fueras" dijo ella para luego retirarse

Ulises se acercó al lado de Aquiles quien veía por donde se había retirado la princesa "que piensas " dijo Ulises para agacharse para recojer la espada 

"Nada mal, nada mal" dijo el más joven "entrenemos" dijo el para luego ambos empezar a luchar 

                   UN TIEMPO DESPUÉS

Era muy entrada la noche y Thalia no podía dormir por lo que decidió dar un paseo por la orilla de la playa, pero ella no era la única Aquiles quien no podía dormir también se encontraba en ese lugar 

"Que haces aquí princesa es peligroso salir de noche para una mujer " dijo el sentado en una roca Serca del agua 

"Puedo defenderme yo misma, además no estoy sola tu estás aquí " dijo ella en un tono desafiante

"Que pasaría si no fuera yo sino otro, un hombre hebrio que viera una mujer bella sin compañía seria una oportunidad perfecta se acercaría por tus espaldas" el se acercó a ella lentamente " te agarraría por detrás" puso sus manos en la pequeña cintura de Thalia "para luego Violarte, no podría soportar que otro hombre te tocara" dijo para luego acercar su rostro al suyo sus narices se tocaban "tú eres mía y solo mía" luego se esas palabras la beso apasionadamente ese beso llevaba varias emociones por parte de ambos tales como lujuria, amor y felicidad

Esa noche Thalia y Aquiles se unieron en cuerpo y alma todo era perfecto para ellos. Desde aquella noche el día era para entrenar y compartir con los demás habitantes de la Nación pero en las noches se pertenecían el uno al otro 

Lamentablemente para ambos Thalia tendría que regresar a Troya en unas semanas más por lo que aprovecharían todo el tiempo para estar juntos, ya que no sabían si algún día se volverían a ver