Quimera.

Rescate.

Molly Prewet siempre había sido una mujer avariciosa, sus padres habían tenido gemelos mágicos, algo alabado por la comunidad mágica, pero cuando ella nació unos años después no fue tan sorprendente. Por eso siempre quiso atención.

Después sus hermanos resultaron criaturas, asquerosas bestias que le quitaron aún más atención, por eso cuando murieron sus padres y también sus hermanos pensó que sería su momento de tener todo lo que siempre quiso, pero no, no le dieron el dinero.

Cuando se casó con Arthur se propuso tener la familia que siempre había deseado, pero no tuvo una hija, intento e intento, pero no fue hasta después de 6 errores que nació su princesita.

Después sus hijos entraron en herencia, uno tras otro, Bill como un tritón y dominante, Charlie como Kitsune y dominante, Percy como tritón, un sumiso también. Después vino su peor pesadilla, los gemelos que tenían tanto parecido con sus malditos hermanos, Kitsunes sumisos.

Tras todo eso pensó que el destino ya la había torturado bastante y cuando su hijo menor no mostró nada que dijera que sería una criatura estuvo feliz, hasta que ese 1 de marzo entro en la suya, eso la rompió, escondió a su hijo en el ático y se negó a pensar que era suyo.
Eso marco su destino y perdición.

P.o.V. Hadrian.

Hadrian se apresuró junto con sus compañeros lo más rápido que pudo en dirección de la casa Weasley, sus compañeros le habían contado como reaccionaba su madre a sus herencias y no estaba dispuesto a dejar que su mejor amigo pasará por eso.

Cuando llegaron a la Madriguera no fue Molly la que abrió la puerta, si no Ginny, quien en lugar de saludar tomo los brazos de sus hermanos y los arrastro rápidamente por la casa y por las escaleras hasta la parte más alta de estás, el ático estaba siempre cerrado.

Entonces fue que Ginny hablo.

- ¡Si ustedes o su compañero pueden apresúrense y abran esa maldita puerta, Ron no a tenido comida desde la semana pasada!

En cuanto las palabras salieron de su boca los gemelos se congelaron en horror y Hadrian, después de una mirada que prometía dolor por parte de Ginny, abrió la puerta por pura fuerza bruta, arrancándola de las bisagras.

Dentro había algo que le revolvió el estómago, un tanque para peses que se puede encontrar en cualquier tienda de mascotas con agua sucia y un joven tritón sumiso encadenado del cuello contra la pared donde estaba la pecera.

Tenía una aleta que podría ser muy hermosa si estuviera limpia, aún así podían ver las escamas azules y violetas, tenía piel pálida y cremosa junto con ojos azules violáceos y cabello salvaje rojo, a pesar de las escamas y lo frágil que se veía ahora, era su mejor amigo, Ron Weasley.

Cuando Ron vio a Ginny entrar en la habitación su cara se preocupo, pero cuando vio a sus hermanos idénticos pareció aliviado y eso paso a sorprendido cuando vio a un dominante que no reconocía entrar y abrazar a los gemelos, que parecían afectados hasta el núcleo.

Hadrian no podía creer que una madre pudiera hacerle eso a su propio hijo, pero en ese momento lo que importaba era sacar a Ron de esa casa, eso sería malo para su salud si continuaba. Entonces Hadrían recordó que era dueño de un yate en la costas y tenía una casa de playa en el continente, así podrían cuidar a Ron sin sospechas.

Llamando rápidamente a un elfo doméstica que estaba unido a sus casas, Plash apareció solo a un momento de la llamada, un pequeño elfo de piel azulada con orejas parecidas a aletas y algo parecido a las branquias.

-Plash, puedes decirles a los demás elfos que preparen el yate en la costa para partir rumbo a la casa de playa en Mallorca.

Al tener su orden el elfo desapareció y fue momento de poner a Ron en un lugar seguro así que alargando la mano para que sus compañeros tocaran el anillo que serviría de traslador para llegar al yate, y así diciendo la contraseña para activarlo (Rosas) se habían ido de la casa dejando atrás a una Ginny Weasley muy agradecida por que por fin todos sus hermanos estaban a salvo, era su momento de actuar.