Prólogo.

341 48 7
                                    

[ T ú   y    y o

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

[ T ú   y    y o. ]


Todo era caos, demasiado ruido, demasiado revuelto, demasiado dolor, miró sus manos, él había hecho todo eso, él provocó todo ese desastre, toda esa muerte, las perdidas, sus pérdidas, sintió que lo perdió todo, lo había perdido todo, estaba seguro de eso, tanto que su corazón se estrujó, no solo por lo que había provocado minutos antes, sino porque sabía que su dueño no volvería a verlo cómo antes, la persona que amaba, esa persona lo odiaría, no podía pensar con claridad, tal solo imaginarse sus ojos llenos de decepción hacia él era suficiente para acercarse hasta la orilla, no volteó, sabía cuál era el límite y que significaba aquello, pero ¿Qué más podía hacer?, se lo merecía, estaba seguro que así era, aunque lo castigaran mil años, nunca pagaría su error y aunque vivirá por esos mil años, no podría con el solo saber que su primero y único amor ya no estaba con él, un hombre tan lleno de justicia cómo aquella persona no podría amar a un asesino como él.

" Ya no era digno de su amor."

El camino se acabó, pero él no se detuvo, se resignó, ya no podía más, no quería sentirse de aquella manera, no era capaz de asumir la consecuencia de sus errores, podían llamarlo cobarde, pero eso era, o así se sentía en ese momento.

" Algunas veces en la vida lo único que podemos hacer es vivir con las consecuencias de nuestros actos."

Sintió un enorme vacío, uno que jamás terminaba, tanto por afuera como su interior, cerró los ojos, una sonrisa amarga reemplazaba la que alguna vez fue hermosa y sincera, su cuerpo dejó el suelo y estaba a punto de desvanecerse en la nada, pero ese no fue el caso, sintió una mano agarrando su brazo, abrió los párpados casi al instante, su cuerpo colgaba desde el acantilado y en aquel instante apareció esa persona, el dueño de su corazón, ese ser que lo había salvado en el pasado con tan sólo un beso, su sonrisa se agrandó, pero no dejó de ser dolorosa de ver y más para la persona que lo sostenía, utilizando todas sus fuerzas para así de esta forma no permitir que cayera al vacío.

— Déjame. —Pidió en un hilo de voz y el agarre en su brazo se hizo más fuerte— Por favor. —Rogó, era mejor si él ya no estaba en este mundo, pero la persona que lo sostenía era mucho más terca que si mismo, lo sabía muy bien, sabía que aquel hombre no tendría ni la más mínima intención en soltarlo y eso era aun más doloroso.

Por primera vez logró notar desesperación en sus ojos, su rostro, siempre tan pulcro y serio, estaba rojo y sudado, se notaban algunas manchas de sangre en sus ropas, no podía definir si se trataba de su sangre o de otra persona, pero incluso con ese aspecto lo vio como algo sorprendentemente hermoso, se sintió afortunado, logró ser feliz, el tiempo fue corto, pero siempre viviría con él, incluso en la muerte, incluso en otra vida... Negó con la cabeza, no podía pensar en eso, ¿Cómo alguien como él podría merecer tener otra oportunidad?, sus acciones imprudentes habían generando su propia sentencia, no merecía nada.

EN OTRA VIDA: Juramento del destino. [WangXian][YiZhan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora