Kiar se removió incómoda sobre la cama, está era una de las pocas noches en las que pudo conciliar el sueño. Tomaba pastillas para dormir, no siempre hacían efecto. Pero esa noche si. No le llevo mucho tiempo identificar por qué se desperto, Astyrian se movía de forma frenética de lado a lado, chocando inevitablemente contra Kiar. Ella se incorporó en la cama, una capa de sudor cubría el rostro de Astyrian quien tenía el ceño fruncido. Tal vez estaba teniendo una pesadilla.
—Astyrian —Kiar tocó su hombro, sacudiendolo un poco.
El abrió sus ojos aguados, observando el techo de la habitación y asimilando su entorno antes de que se percate de que Kiar estaba a su lado con una mirada preocupada sobre él.
—¿Qué pasó?
No podía recordar si había tenido un sueño o una pesadilla, solo podía recordar como se sintió. No le gustó nada, no había experimentado esas sensaciones desde que era un adolescente. Desesperación, irá y confusion.
—¿Fue una pesadilla? —insistio Kiar.
—No lo sé.
Ni siquiera habían destellos de recuerdos en su cabeza, no había nada.
—Pero estoy bien, creo que me dare una ducha —murmuro, sentandose sobre la cama.
Era consciente de la preocupacion de Kiar, en ese momento se cuestiono que tan mal se veia durmiendo como para que ella tenga esa expresion.
—Esta bien, es tu dia libre. Yo que tu aprovecho a dormir y luego podemos hacer un picnic en el lago.
Astyrian se golpeo mentalmente, se había olvidado de decirle a Kiar que no iba a estar en el unico día en el que ambos podían estar juntos. Mentirle querras decir, dijo una voz en su cabeza. Le dio la razon de todas formas, el debía mentirle. Añadir una razón mas de ser a la profunda culpa que tenía en cuanto a Kiar. Ella no se lo merecía, pero debía hacerlo.
—En realidad, debo ir al hospital para asesorar a los recien graduados que llegan hoy. Necesitan mi ayuda. Pero estoy seguro de que la proxima semana Shivan me cubrira.
No pudo ignorar la pizca de decepcion en el rostro de Kiar, no podia decirle que iba a ver a su madre ya que estaba seguro de que ella querría ir con el.
—Oh esta bien, aprovechare a ir a visitar a mi madre supongo —dijo ella.
Astyrian tomo su mano, dedicándole una suave sonrisa. En el fondo de su mente, resonó la idea de que era el peor futuro esposo que podía existir.
La noche estaba fría y silenciosa, Clover prendió un cigarrillo mientras observaba el asfalto. No podía dormir, la imagen de Breyson muerto se impregno en sus pensamientos sin posibilidades de querer irse por un tiempo. Le echo un vistazo a la hora mientras conducía, eran las tres de la madrugada. Nadie había notado que se había ido, al menos no sabía si realmente Rellian dormía o tan solo se encerraba en su habitación, evito ver a Paxton así que no sabía realmente que fue de el, tan solo se mantuvo encerrada. Hasta ese momento.
Vio con desdén como solo había un farol iluminando débilmente la cabaña que solia ser su casa, irónicamente la que le había tocado encender a Polly estaba débilmente encendida. Como si estuviera a punto de perder la poca vida que le quedaba.
Realmente no estaba segura de que hacía ahí, o que quería probarse a si misma pero necesitaba aclarar su cabeza y el único lugar en el que sentía que podía usar la razón era su antiguo hogar. Entro lentamente, los peldaños crujían bajo sus pasos. Siempre odio ese ruido, mas cuando se trataba de darle sorpresas a Polly. Deslizo su dedo por el sillón húmedo a causa de la gotera sobre el, una lenta sonrisa se deslizo por sus labios cuando un recuerdo vino a su mente.
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Family Ties© GM ²
Mystery / Thriller«Bienvenido, el juego nunca se termina» Libro número dos de Gemelos Malditos