♡¿քʊɛɖɛֆ օíʀʍɛ?♡

I

Los pasillos de la sala de Emergencia estaban como casi todos los días, llenos y con personas desesperadas al borde del llanto. Manuel llegó al lugar mirando todo, familiarizándose con lo que sería "su nuevo hogar", un mes pasó rápido y ahora estaba en Buenos Aires

-Bien, Manuel... ¿verdad?

Al escuchar aquella voz el español giró encontrándose con un doctor aparentemente solo un par de años mayor que Él

-soy el Dr. Víctor Gutierrez -se presentó amablemente

-Tenemos el mismo apellido -sonrió sorprendido

-Sí -asintió devolviéndole la sonrisa

-Pero luego nos fijamos en el apellido ahora vamos, tenemos cosas que hacer

Le dio leves golpecitos en la espalda del español, y caminó indicándole que lo siguiera

-Debo mostrarte a todos los pacientes y cual es su estado

Manuel seguía a Víctor mientras miraba todo a su alrededor, se sentía como un niño pequeño en una juguetería, pero no por el hecho que disfrutara viendo gente enferma, sino porque era su primer lugar de trabajo

Durante el recorrido Manuel se topó con casos de apendicitis, Accidentes de tránsito, accidentes domésticos, quemaduras de primer grado, hasta que llegó a la que sería la última habitación de aquel pasillo

-Y este es el caso más grave que tenemos

Víctor abrió la puerta invitándolo a pasar , Manuel entró encontrándose con una hermosa chica, estaba conectada a un marcapasos y a una sonda nasogástrica, estaba inconciente

-¿Quién es? ¿Qué le pasó? -preguntó con curiosidad mientras la miraba atentamente

-su nombre es Beatriz Urquiza, tiene 24 años, hace 1 mes tuvo un accidente de tránsito, llegó muy mal, tuvo un paro y tuvimos que reanimarla, su caso es delicado, Ella se está dejando morir poco a poco -Víctor miró a la chica, su mirada reflejaba ternura y algo de tristeza -tal vez es porque no tiene familiares que la visiten, hemos intentado ubicar a un familiar, pero según algunos compañeros de su trabajo Ella no tiene a nadie, pobre, me da pesar que nadie la venga a visitar, Él único que viene es Marcos Golden pero no entra acá, dice que le es difícil verla, ha venido y ha intentado verla, pero al final no puede, y se marcha, Él ha estado pagando los gastos del hospital

-Y... ¿Porqué... dices que se está dejando morir?

-Cada día va empeorando, la verdad yo quisiera ayudar, y hacer más por Ella, pero no puedo

-He escuchado... -Víctor lo miró con curiosidad ya que Manuel parecía algo curioso y también apenado -¿Qué hay de cierto en que.... en que las personas en su estado pueden oír cuando les hablas?

-La verdad no lo sé -Esbozó una pequeña sonrisa mientras no le quitaba la mirada a la chica -Pero posiblemente sea verdad, Tal vez si alguien le habla y le da solo una palabra de aliento para que luche, Ella volviera a la vida -Un suspiro salió de Manuel, Víctor miró hacia Él y luego le regaló una sonrisa, ambos salieron de la habitación de la chica -Creo que será mejor que vayas a descansar y mañana regresas con todo el ánimo del mundo

-Tienes razón, debo buscar un departamento, dejé todas mis cosas abajo -sonrió avergonzado

-¡Mirá! Ya que me caíste súper bien, te dejaré quedar esta noche en mi departamento, no es fácil conseguir una habitación -Víctor miró su reloj para afirmar que su turno terminaría en 15 minutos

-No quisiera incomodar

-claro que no incomodas, además vivo solo en un departamento para dos personas,