Chicxs esto es algo muy pero muy importante. Si eres sensible a este tipo de cosas, te imploro que no lo leas y te abstengas de lanzar comentarios al aire. No será pedofilia, contemos de que los dos son menores de edad, espero que no haya ningún inconveniente.
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Estabas despidiéndote respetuosamente de tu profesora, ya estabas cansada y lo peor es que tenías que llegar a hacer tareas y trabajos.
Leía todas las hojas sueltas vacías esperando ser ocupadas, se tenso al pensar en la tarde tan larga que la esperaba en casa, no podía hacer nada mas.
Antes de llegar a su casa se encontró con el mejor amigo de tu hermano, este se acercó rápidamente a esta, posando su mano en su hombro.
-Hola, te veo estresada. Otra vez matemáticas?.
Asentiste frenéticamente acertando su pregunta. Realmente no querías distraerte, pero tampoco querías ser grosera y despedirte como si nada.
-Si... ya sabes como es la... señora. Hmm, no quiero ser grosera pero... tengo que irme a hacer la tarea, me entiendes?.
Y ahí estaba, Soo, tan tierna, tímida e inocente. Muy respetuosa y piensa mil años cada cosa o acción que ejecutará.
-Está bien, te visito luego.
¿Te visito? No quería su visita, pero rápidamente dejó de pensar en eso, solo quería ser agradable.
Hablemos un poco de Soo
Niña de 13 años (casi catorce) con cabello un poco mas abajo de los hombros, color café claro. Un capul adornando hacía un lado, realmente adorable. Ojos color café oscuro y tez café con leche, mas leche. Mide 1.63, no es bajita para su edad, y eso era lo mas bonito de ella.
Ahora, de Jungwoo
Un chico de 17 años, con cabello café oscuro y ojos del mismo color. Su tonalidad es blanca y mide 1.80. Hermoso entre todos los hombres. Deseado entre todas las mujeres.
Ahora, Soo. Estaba estaba mas que clavada en sus papeles y números. Hasta que llegó su hermano, y para su sorpresa Jungwoo venía con el.
-Estás muy estresada? Tranquila, lo terminarás.
Lo miraste con mala gana. Viste como los dos se sentaban en el sofá al lado de ella. No perdió tiempo y movió sus neuronas.
