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Jimin respiró tembloroso.

Todo iba bien. Todo estaba perfecto.

Hace dos días había tenido la cita más perfecta de toda su vida. Había reído con jungkook durante horas, se había sorprendido al notar que lo llevó al parque dónde prometieron casarse cuando pequeños, habían comido hasta reventar y habian vuelto a cass con manos entrelasadas. Incluso Jimin le había ganado un oso gigante a Jungkook y éste estaba tan feliz por ello.

La salida le había dejado una calma y plenitud interior. Pero ayer mientras hacía los deberes escolares (porque aunque haya vuelto a la escuela apenas ssnaron sus costillas seguía con uno que otro trabajo atrasado) habían tocado la puerta, y fue abrir debido a que su madre estaba preparando el almuerzo.

No esperó toparse con dos policias con una carta en mano.

Había tartamudeado comenzando a preguntarse que hacían ahí

Pero no era tonto...solo no quería recordarlo.

No queria afrontarlo.

Se había quedado paralizado, tomando la carta con las manos temblorosas. Ni siquiera escuchó lo que dijeron, tampoco notó cuando su madre llegó a su lado, intercambiando palabras que se escucharon lejanas para el.

Todo su pequeño mundo rosa que había construido habia vuelto a caer. Había vuelto a ser gris.

Tenía que ir al juicio mañana.

Así, con sus declaraciones el hombre quedaría con una pena o sentencia y no solo prisión preventiva. Interiormente jimin se habia atormentado con ello, sabía que había pospuesto lo que tenia que llegar. Incluso había mentido que no se encontraba listo física ni psicológicamente pero de eso fueron dos veces. A la tercera no podía simplemente retrasarlo más. Era un ultimátum.

Y no sabía que hacer.

Cuando oía a su madre hablar por telefono con el abogado Jimin salía casi corriendo. No quería nada, queria estar solo y lejos.

Pero ahora se veía en la obligación de ir si realmente quería que ese hombre pagase por todo el daño psicológico y físico que le hizo. Tenia que ser fuerte como siempre pero repentinamente no podía hacer mas que sentirse pequeño y asustado, lleno de inseguridades. Necesitaba aferrarse a alguien, alguien que le mantuviese los pies en la tierra.

Alguien que fuese su pilar.

Y a su mente llegó Jungkook.

E inevitablemente su cabeza se llenó de inseguridades, porque en el fondo sabía que la inseguridad que ahora tenía con jungkook respecto a si de verdad estaría para el en ese tipo de momentos nunca se fue. Siempre estuvo ahí escondida esperando a que sucediese una situacion como aquella. Había dicho que le perdonaba, que bastaba con quererse y que ya todo era parte del pasado.

¿Pero era así?

¿Podía confiar en el? ¿Le dejará solo? ¿Estará con él en el juicio? ¿Irá?

Jimin se encogió, llorando. Se sentía solo y atrapado.

Sus manos picaron por tomar el celular, marcarle y decirle. Sin embargo, la inseguridad y el miedo fueron mas fuerte. Porque por mas que gustes de una persona, por mas que la quieras y se arreglen, una vez que te fallan y rompen algo tan fragil, difícil es recuperarle.

Jimin solo deseaba...poder olvidar aquel momento de su vida. Así como también poder ser lo suficientemente fuerte como para enfrentarle mañana y mirarle a la cara dándole a demostrar que estaba vivo y muy dispuesto a secarle en la cárcel porque es así.

Solo que Jimin no está preparado en lo absoluto para verle de nuevo.

Pero lo que sí sabia, es que no iba a permitir que saliese en libertad. Así se desmayase, llorase, con un ataque de panico Jimin declararía si o si cada momento.

Y tenía pruebas de cuan bastardo era su padre, muchas mas de las que tomaron los policias.

Jimin observó su teléfono. Donde tenía grabadas la mayoría de las amenazas cuando su padre llegaba borracho.

Tenía que ser fuerte.

Con o sin Jungkook.

Solo o acompañado.


NOTA.

Hola cielitos, espero que estén muy bien.

No creerían que todo iba a ser muy rosa, o si? Hay cabos que atar aquí todavía.

Amo el drama.

Denle amor♡♡

▪︎Friends▪︎ [Kookmin] 🐣🐇Donde viven las historias. Descúbrelo ahora