Prólogo.

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Mire entre el segundo estantes de cereales, y no lo conseguí, tenía al menos media hora buscando mi cereal favorito, y luego de ver cientos de tipos de cereales, aún no conseguía mis Choconuts. Era tan malditamente difícil conseguir un puto cereal de chocolate con maní.

-Tienes que estar por aquí, cosita rica y difícil de conseguir.- cante mientras iba en mi búsqueda.

Como si fuera una revelación del cielo, una deliciosa epifanía, una voz celestial lo vislumbre a dos cajas de cereal, alli solito y sin compañía esperando por mi, con su brazitos extendidos hacia a mi, o así lo pinto mi imaginación, me acerqué sin dejar de mirarlo, y cuando mi mano estaba a punto tocar el cartón, una mano cacheteo la mía, por lo cual levanté la mirada furiosa.

-¡¿Qué demo...- exclame con lo dientes apretando y seguramente fuegos en mi ojos, levanté la mirada y un chico de ojos verde, me miraba con gracia mientras acariciaba la caja de mis Choconuts.- ¡Oye grandísimo imbécil! Esa caja.- la señalé con mi índice mientras lo miraba, el llevo su vista hasta la caja y luego hasta mi.- Si exacto esa que está en tus feas manos, es mía.

- Yo la vi primero.- inquirió con una sonrisa lobuna.- De hecho ya no es "Tu caja"  diría más bien que es mía.

- Yo la vi... mucho más primero que tu, seguramente hasta llegue antes que tu, y golpeaste mi mano imbécil, así que dame mi jodida caja.- rebati detallandolo mejor, tenía unos ojos verdes, de hecho unos ojos muy hermosos, pero que quería arrancar justo ahora, su piel cremosa y blanca era adornada por una cabellera negra, y unas bondadosas cejas y pestañas, era muy guapo en realidad, era alto por lo menos dos cabezas más altos que yo, y fornido de hombros anchos, traía un jogger gris, y una sudadera. Pero por más que lo viera sólo podía mirar su gran cara de roba cereales, lo cual hacía que por muy guapo que fuese, quisiera arrancarle las pestañas con un corta uñas.

- Uno: No la golpee, la aparte con fuerza, Dos: Yo también tenía rato buscándola, y Tres: Ya te lo dije, no es tu jodida caja es mía.- enumeró examinando mi rostro como yo minutos antes el suyo.- Oye eres muy linda, pero gruñona, que tierna.

-¡¿Que carajos?! Sólo quiero mi caja.- me acerqué molesta.- no me interesa tu estupidez, ni tu listica de mierda, sólo me interesa eso que está en tus manos.

-Tengo más cosas que podrían interesarte.- insinuó coqueto.

-Ahora mismo sólo me interesa: ahogarte en ácido y esa caja, por la cual vine desde muy lejos, y estuve media hora buscando, y llegas tu, grandísimo imbécil a quérer llevártela.- mentí con lo de muy lejos, mi departamento quedaba al lado del minimarket, pero me había levantado por mi cereales, y me iría con ellos.

-¿Sabes? Estoy ocupado, y no tengo tiempo para hacerle de Blanca Nieves.

- ¿Blanca Nieves?.- pregunté ceñuda.

-¡Joder! Para tratar con un enano.- se hecho a reír fuertemente y luego me miro aún riendo.- Bueno me voy hermosa, fue todo un gusto.- concluyó para si mismo dándose media vuelta dejándome con la palabra en la boca. Y como se que no puede salirse con la suya pegue un fuerte salto y me guinde de su espalda, amarrando con mis brazos, parte de su hombro derecho y su cuello.

El pego un fuerte grito, sacudiendose para bajarme.- ¡¿Qué mierda?! Estas loca enana, estas muy loca!.- grito mientras se sacudia.

-¡¡Dame el cereal!!.- exigi apretando más.

-Ni en tus sueño más mierdas.- negó y empezó a reír, lo que me pareció raro y empeze a soltarlo un poco.- Es más, ¿Sabes qué? No será ni para ti, ni para mi.- termino de hablar y rompió la caja justo a la mitad, haciendo que cada granuela cayera en el suelo desparramandose por todo el pasillo, por lo que lo solté y termine de bajarme.- Eres muy linda, pero una pregunta siempre te le guindas a las personas así, para no se... ¿conocerlas quizás?

-Claro que no, imbécil.- respondi y luego bufe enojada, sin decir más nada me di media vuelta y me marché sacándole el dedo corazón y mostrándoselo por encima de mi hombro.

-¡Oye! Pero en serio que eres linda y enana.- grito mientras me alejaba por lo que seguí caminando hacia la salida, había venido sólo por mis Choconuts, y que lindo show me termino consiguiendo.

-Limpieza en el pasillo 6, cereales y golosinas, dos idiotas rompieron una caja de cereales.- dijo la chica por el intercomunicador mirándome desde una caja registradora, yo sólo le tire un beso, y ella rodo los ojos.

Menudo imbécil hay en este mundo.

《《♡》》

Portada hecha por: @verodipierro

Perfecta Sincronía (En Edicion).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora