Feliz cumpleaños Jungkookie •Taekook•

°Capitulo 4°

Algunos rayos de sol que entraban por la ventana comenzaban a molestar a Jungkook, al querer moverse nota unos brazos rodeando su cintura y unas piernas entrelazadas con las suyas, dándose cuenta que tenía a Taehyung tan cerca que no se sabría dónde empezaba uno y dónde terminaba el otro. 

Comenzó a acariciar con delicadeza el pelo de Tae, tan sedoso como siempre, luego pasa las yemas de sus dedos por las mejillas y nota lo suave que son, como siempre, detiene su pulgar en los labios, esos labios tan besables y tentadores, como siempre. Desde que tiene uso de razón quiso probarlos y asegurarse que su teoría de que sabían a gloria, no era errónea.

Al observarlo llega a sus pensamientos que sería de el si su mamá lo llevaba lejos, que sería de el si no podía tener más a su TaeTae. Sabía que el mayor no le correspondería su amor, pero se conformaba con solo ser su mejor amigo, joder, podría vivir toda su vida siéndolo, no le importa con tal de tenerlo cerca, era su pilar y estaba seguro que sin el se derrumbaría.

No terminaría de nombrar las veces que Tae lo sostuvo, como esa vez cuando su perrito Tobi había muerto, entre los dos niños de 8 y 10 años le habían otorgado un funeral digno por la buena mascota que fue. Jungkook lloro en el pecho de Taehyung toda la noche, sin soltarlo un segundo.

O cuando sus padres tuvieron la primera pelea, el pequeño no tan pequeño Kook con 13 años salió por su ventana y sin dudar fue en busca de su mejor amigo, cegado en llanto y angustia, se refugio en esos brazos que le brindaban tanta protección, amor y paz.

También habían pasado buenos momentos, veranos que parecían interminables por lo bien que la pasaban juntos, películas y videojuegos hasta altas horas de la noche.

Eran invencibles juntos, así se sentían, lo eran si se tenían el uno al otro.

Taehyung comenzó a despertar al notar esas caricias llenas de amor que el menor le brindaba.

- Buenos días Jungkookie 

Su voz ronca sonó en la habitación, Jungkook detuvo sus caricias y miro los ojos del contrarió.

- Buenos días Tae, gracias por quedarte anoche...

Avergonzado escondió su cabeza en el cuello de Tae haciendo reír a éste.

- No es nada, sabes que siempre estaré para ti

Acariciando su espalda, huele su pelo y se inunda con el aroma a cerezas que tenía, definitivamente amaba el shampoo de su kookie.

- Deberíamos bajar y desayunar Kook, tu mamá llegará pronto del trabajo y debemos charlar con ella ¿está bien?

- Solo unos segundos más por favor...

Chasqueando la lengua Taehyung niega y atrae más cerca a su amigo, nunca le podría negar nada.

- Esta bien, solo unos segundos más.

Luego de 30 minutos los dos se encontraban en la sala desayunando, Taehyung era muy bueno en la cocina así que el preparo todo mientras Jungkook lo ayudaba, comiéndose todo lo que se le cruzaba por delante y siendo regañado por su mayor.

Habían terminado su desayuno cuando escucharon la puerta ser abierta y de ella aparecía la señora Jeon con ojeras tan grandes que no podrían taparse ni con todo el maquillaje del mundo.

- Chicos ¿cómo están? Logré salir antes del trabajo, debemos hacer las maletas y intentar que todo esté empacado para mañana

La mamá de Jungkook seguía hablando sin darse cuenta que a los dos menores se le llenaban de lágrimas los ojos.

- Señora, disculpe mi atrevimiento, se que está pasando por un mal momento y usted sabe que la quiero como si fuera mi segunda madre, pero no creo que se esté dando cuenta del daño que le está causando a Jungkook.

Yeri miro a su hijo y volvió su vista a Taehyung.

- Lo siento chicos, en verdad que lo siento, pero no cambiaré de opinión. No puedo seguir en esta casa que solo me trae malos recuerdos, no hay vuelta atrás, mañana será nuestro último día en esta cuidad. Me iré a empacar, Jungkook deberías hacer lo mismo o no llegarás. Con permiso chicos

El nombraron solo bajo su mirada y comenzó a llorar en silencio. Al instante sintió unos brazos que lo apretaban como si fuera escaparse, aunque la realidad fuera esa.

-Mi Jungkookie ¿Qué haré sin ti eh? ¿A quién molestaré con mis ocurrencias? ¿Quién aguantará mis locuras? ¿A quién protegeré de la oscuridad? ¿A quién abrazaré por las noches por que le da miedo las tormentas? Joder, no quiero dejarte ir, no puedo

Sus llantos eran incontrolables y la intensidad con la que se abrazaban parecía no alcanzarles, si fuera posible fundirse entre sus brazos, lo harían, créanme lo harían.

- TaeTae, ya no hay manera de remediar esto, pero, ¿puedo pedirte solo una cosa?

- Lo que quieras Jungkook, te bajaría la luna si así lo quisieras.

Les fue inevitable no reír.

- Tan cursi TaeTae, solo voy a pedirte que no te olvides de mi, podemos hablar todos los días, te escribiré en cada momento que tenga libre, te enviare fotos y tú me enviaras fotos, haremos videollamada todas las noches, como si estuviéramos juntos... Pero por favor no me olvides

- Jamas podría hacerlo mi pequeño Kookie ¿Recuerdas la promesa que hicimos ese día que nos conocimos?

- Claro que si, mejores amigos por siempre

- Exacto, mejores amigos por siempre, pase lo que pase siempre estaremos juntos

Ese día les fue inevitable soltarse, entre risas y llantos empacaron las cosas del menor. 

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Los dos días faltantes pasaron tan rápido como si de una estrella fugaz se tratarán.

Jungkook dentro del camión de mudanzas lloraba como si el mundo se le cayera encima, pero eso era poco si lo comparaban con lo que en realidad sentía el en esos momentos, al ver cómo su mejor amigo, el amor de su vida, estaba en las mismas condiciones que el, tirado en el césped y gritando que no lo dejara. Pero que podría hacer Jungkook, solo era un niño de 14 años.

Cuando el camión arranco, grito como si le hubiesen roto el corazón a pedazos, porque justamente eso había pasado.

Y así comienzan los caminos separados de Jeon y Kim.

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Está cap es un poco más largo, espero que siga siendo de su agrado ♥️