c a p í t u l o c u a t r o

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Diez años

ㅡ Mira eso.ㅡ dijo YuRi con los ojos muy abiertos mientras miraba la televisión. Tiró de una de las trenzas a la que estaba echándole cera y YeNa gruñó adolorida.ㅡ Lo siento, pero... uh...

Era bastante tarde y estaban levantadas, incluso aunque tuvieran escuela al día siguiente, viendo los canales que su madre seguía olvidando cancelar; y no importaba porque MinHo, ahora su padrastro, y ella, habían ido a cenar con unos vecinos. YeNa estaba sentada en el suelo con las piernas cruzadas y YuRi estaba detrás de ella, en el sillón, sus piernas a cada lado del cuerpo de su hermana.

ㅡ Wow, mira como se besan.ㅡ dijo YeNa.ㅡ No puedo esperar para besar a un chico así. Nunca he besado a nadie.ㅡ YuRi jaló del cabello de YeNa a propósito.ㅡ ¡Ouch!

ㅡ Me has besado a mí, estúpida.ㅡ comentó la menor, sonriendo de costado.ㅡ Y solo tenemos diez años, así que no deberías besar a chicos de ese modo.

ㅡ Eso es lo que mamá dice.ㅡ respondió YeNa.ㅡ Además, no te he besado así, solo es un beso de buenas noches.ㅡ Apuntó la televisión donde se veía a dos personas muy cerca que estaban chupándose mutuamente la cara.ㅡ Eso es un beso real. Observa, hay lenguas y toda esa mierda.

ㅡ Parece grotesco.ㅡ dijo YuRi. Enceró una trenza más, apartando el bote de cera, y dio una palmadita en la cabeza de YeNa.ㅡ No quieres hacer eso.

ㅡ Uh... sí quiero hacerlo.

YuRi continuó jalando el cabello de YeNa, poniendo un pie en el hombro de su hermana y presionando con sus dedos.

ㅡ ¿Por qué? Luce húmedo.

ㅡ Húmedo está bien.ㅡ dijo YeNa, riendo.

ㅡ Hm...ㅡ Las manos de YuRi acariciaron el cuello de YeNa, presionando suavemente. La mayor gimió con el toque. YuRi nunca podía sentarse con YeNa y no tocarle, era imposible. Y la castaña amaba eso.

ㅡ Dame un masaje.

ㅡ ¿Estás adolorida?ㅡ preguntó YuRi, con un poco de preocupación en la voz.ㅡ ¿Es porque anoche te pateé fuera de la cama?

ㅡ Quizá.ㅡ contestó YeNa.ㅡ Quizá ya no vaya a dormir contigo y los monstruos te vayan a atrapar.ㅡ Ambas rieron.

ㅡ Tienes que dormir conmigo porque me amas.ㅡ dijo YuRi, poniéndose seria de repente. YeNa se giró moviendo las piernas de YuRi en el proceso.

ㅡ No voy a dejar de dormir contigo, solo estaba bromeando.ㅡ contestó. Tomó la mano de su hermana y apretó.ㅡ ¿Está bien?

YuRi sonrió.

ㅡ A mamá le gustaría que lo hicieras.

YeNa tornó los ojos y centró su atención de nuevo en la pantalla de la TV. Las manos de YuRi todavía estaban moviéndose por su cuello y hombro, y sintió las piernas de la menor a sus costados, más cerca. YeNa se inclinó hacia atrás, descansado su cabeza en el estómago de su hermana.

ㅡ Mira eso.ㅡ murmuró YeNa.ㅡ Parece que ni siquiera van a separarse por aire.ㅡ La pareja que esta besándose en la televisión hacía que en el estómago de YeNa se sintieran mariposas.

YuRi ladeó su cabeza, viendo.

ㅡ Supongo que están respirando uno del otro, tal vez.ㅡ YeNa pellizcó la pierna de su hermana.

ㅡ No puedes respirar por otro, idiota.

ㅡ Oye.ㅡ contestó YuRi.ㅡ Nada más era una suposición.

YeNa asintió. Se incorporó y fue hacia el sillón, acurrucándose contra YuRi. Tomó la mano y comenzó a apretujar cada nudillo, disfrutando. YuRi suspiró contenta y apoyó su cabeza contra el hombro de su hermana.

❝ Don't Tell Mom ❞ YulyenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora